El gobernador del Chubut, Mariano Arcioni, confirmó que la provincia podría no poder afrontar este año el pago de los vencimientos de deuda y pedirá a la Legislatura autorización para avanzar en una reestructuración. De ese modo, cae en un default al mismo tiempo que el presidente Mauricio Macri asegura a los países que pueden invertir en la Argentina en Davos, porque el país es creíble.
Arcioni confirmó que convocará a una nueva sesión extraordinaria para la primera quincena de febrero y adelantó que pedirá que se trate la ratificación del Pacto Fiscal y la Ley de Emergencia Económica.
El mandatario provincial aclaró que en esa sesión el Poder Ejecutivo no pedirá autorización para emitir un nuevo bono de endeudamiento sino para «poder avanzar en la reestructuración de la deuda».
«No quiero endeudar más a la provincia; sí quiero renegociar», sostuvo el mandatario chubutense que asumió en al frente del Ejecutivo en noviembre de 2017 tras el fallecimiento del gobernador Mario Das Neves.
Tras un acto oficial por la reactivación del yacimiento de Bella Vista Oeste, Arcioni le pidió a los legisladores de la oposición que en diciembre no le aprobaron la Emergencia Económica ni el Pacto Fiscal que «dejen de lado las mezquindades políticas. Si hoy no sacamos todos juntos a la provincia adelante no la sacamos más», advirtió Arcioni luego de reconocer que el Chubut no tiene recursos para hacer frente a los vencimientos de la deuda contraída.
La administración chubutense debería afrontar este año vencimientos por unos u$s 120 millones correspondientes a títulos públicos emitidos por los ex gobernadores Das Neves y Martín Buzzi.
«Estamos pidiendo negociar bajo mejores condiciones una restructuración de la deuda», sostuvo Arcioni; Chubut está pagando actualmente un 9% anual en dólares por la deuda y en el equipo del mandatario estiman que en una reestructuración podrían bajar esa tasa al 5%.
En medio de la crisis financiera, el gobernador le pidió a la Legislatura que apruebe la adhesión al Pacto Fiscal firmado con la Nación porque si eso no ocurre, la provincia «perderá $ 1400 millones por año».