La inflación de diciembre se ubicó en el 25,5% mensual y economistas advierten que enero podría estar cercano a esos valores. Con sueldos navegando bastante por detrás, es que el poder adquisitivo merma constantemente. Es por ello que Ámbito armó una lista de consejos claves para intentar sobrevivir a la brutal suba de precios. Alguno de ellos parecerán obvios, otros no tanto, pero siempre es bueno prestar atención a cosas que naturalizamos hacer y que tanto pueden modificar nuestra vida diaria.
Tarjeta de crédito: uso responsable y a nuestro favor
En épocas de alta inflación la tarjeta de crédito puede ser un arma de doble filo. Pero antes de hablar de los beneficios para usarla diremos como NO debemos hacer uso del plástico. La tarjeta de crédito no es una extensión de nuestro sueldo. Es importante conocer el poder adquisitivo que tenemos y tratar de moderar el consumo. De lo contrario podemos usar la tarjeta para gastar más de lo que ganamos y generaremos una bola de deuda. También hay que evitar a toda costa pagar solo el mínimo. El monto mínimo equivale generalmente al 5% o 10% de la deuda y el resto está compuesto por intereses, comisiones e impuestos. Si se repite esta práctica cancelar la deuda será prácticamente imposible.
Ahora veamos cómo podemos usarla a nuestro favor. En contextos de alta inflación las cuotas sin interés o con intereses muy bajos son muy convenientes. El Gobierno lanzó el programa «Cuota Simple» con financiamiento en 3 y 6 cuotas, con una tasa equivalente al 85% de la utilizada como referencia para los plazos fijos por el Banco Central. En estos momentos es la más baja del mercado.
También es importante conocer a la perfección los descuentos que promueven los bancos (los días en que aplican descuentos en pagos en compras al supermercado o combustibles, por ejemplo). Si no llegamos a pagar el monto completo es importante saber que podemos abonar el monto que nosotros deseemos y al momento del mes que queramos.
Supongamos que tenemos $200.000 que abonar este mes y solo podemos cubrir $100.000 podemos abonar esa cifra y solo pesarán intereses sobre la mitad. Por otra parte, conocer la fecha de cierre es clave. Podemos aprovechar el cierre de la tarjeta para hacer gastos importantes justamente inmediatamente después de esa fecha clave y conseguir el mayor periodo de tiempo posible hasta pagar la primera cuota.
Adelantá gastos y buscá ofertas
Ante la constante remarcación de precios. Será importante analizar y comparar precios en los supermercados y, de ser necesario, adelantar, cuando se pueda, compras al por mayor. Tal vez varios familiares o amigos se puedan juntar y comprar en cantidad bolsones de verduras o directamente a productores o a fábricas. Hoy por hoy no es tan complejo y se puede programar vía on line. Es necesario, además, tener conciencia de gastar lo estrictamente necesario.
Un consejo clave en las compras de supermercado será revisar los precios y comparar las marcas a través de los valores por litro, por kilo, por m2, etc.
Maximizá la eficacia de los servicios
Otras importantes subas están sucediendo en servicios de prepagas, seguros de automóviles, internet, telefonía, etc. Es importante, sobre todo en las prestaciones de servicios, comunicarse con las empresas proveedoras y pedir mejoras. Más de una vez al llamar a la empresa prestadora de internet ofrecen promociones por 6 o 12 meses.
Rentabilizá tus ahorros con billeteras virtuales
Hay muchas personas que dicen no poder ahorrar y que no conocen instrumentos financieros para hacerlo. Pero dejar los pesos parados en la caja de ahorro todo el mes es un gran error.
En la actualidad, las billeteras virtuales dan la misma prestación que una cuenta en el banco, ya que permiten pagar y disponer del dinero en todo momento, pero con la ventaja de que generan una pequeña rentabilidad. Así, Ualá, Mercado Pago, Naranja X son algunas de ellas, y de forma completamente gratuita permiten generar intereses por tener el dinero en la cuenta hasta que le des un uso.
Invertir al menos una parte de tu sueldo
Para quienes quieran rentabilizar su dinero con un poco más de complejidad se pueden abrir una cuenta comitente en su propio banco o en un broker de bolsa.
Esto permitirá, por ejemplo, adquirir dólar MEP o invertir en instrumentos como Fondos Comunes de Inversión. No es necesario ganar grandes sumas de dinero para poder invertir en instrumentos que son muy fáciles de usar y que brindarán una rentabilidad que ayudaría a no perder contra la inflación.
Hoy una de las formas más sencillas es armar un plazo fijo UVA que sigue al precio de la inflación. El plazo mínimo es 180 días. El BCRA permite pre cancelar el plazo fijo, es decir, retirar el dinero a partir del día 30 y con 5 días hábiles de preaviso. Sin embargo, en la letra chica hay una advertencia que dice que se pagarán mucho menos intereses de los acordados.
Tené mucho cuidado con endeudarte con préstamos personales
Muchas veces al intentar refinanciar la deuda en una tarjeta o al pedir un préstamo solo nos notifican la TNA (Tasa de Interés Anual) y no el Costo Financiero Total (CFT) que es el valor total de un crédito. Esta medición tiene en cuenta la tasa de interés y además los distintos gastos vinculados con el otorgamiento y la gestión del préstamo o crédito. Solo el CFT será el que indique lo que se pagará de forma total por el financiamiento de la deuda. También puede ser útil el CFTEF (sería el Costo Financiero Total Efectivo Anual).
Hacé un presupuesto
En un contexto con una alta inflación es muy complejo hacer un presupuesto mensual que sea exitoso, ya que mes a mes nos van a variar. Allí hay que determinar nuestros ingresos y nuestros gastos fijos, mes por mes. Eso determinará el dinero disponible, por ejemplo, para gastos variables (cumpleaños, regalos etc.) y ver la mejor forma de afrontarlos. Después hay distintas formas de medir cómo está armado nuestro presupuesto: por ejemplo la regla 50-30-20: 50% para los gastos fijos dentro y fuera del hogar (vivienda, nafta, impuestos etc), 30% para gastos variables del mes (salidas, vacaciones et), y 20% para ahorro y pago de deudas.
Evitá los gastos hormiga
Se denomina «gasto hormiga» a todos aquellos gastos que no estaban planificados y no corresponden a gastos fijos. Por ejemplo, salí de trabajar, pasé por la farmacia a comprar un remedio y ya que estaba me traje un esmalte de uñas. Es una compra que no pensaba hacer, pero finalmente la hice. Así, desde tomar un Uber, un café al paso, pedir delivery porque llegué tarde, pasar por un kiosko y comprar golosinas, todos los días podemos hacer pequeños gastos evitables. Los gastos hormiga se pueden llevar hasta un 20% de tu sueldo. Para «curarse de ellos» tal solo con un par de días llevando registro de lo que gasto sin pensar podré tomar dimensión de la cantidad de plata que podría usar para otras cosas.
Revisá las deudas pendientes y los intereses que pesan
Muchas veces dejamos para otro momento impuestos impagos, deudas con prestadoras de servicio, multas, etc pero en contextos de alta inflación y desregulación de la actividad económica esto es un gran error. Hay que tener presente cuál es la situación actual, qué deudas tenemos, y cómo eventualmente podríamos cancelarlas. En algunos casos se puede pedir un plan de pago, moratorias, etc. Dejarlas correr es un grave error y nos comerán vivos los intereses.
Tener siempre un fondo de emergencia
Un fondo de emergencia es una reserva de efectivo que solo se guarda para crisis o emergencias financieras. Algunos ejemplos comunes son arreglo del auto o algún electrodoméstico de hogar o alguna deuda impensada que quedó sin que le prestaran atención. Los fondos comunes de emergencia deben cubrir al menos 6 meses de gastos fijos. Es recomendable hacerlos en moneda extranjera o en algún instrumento financiero que permita obtener el dinero en no más de 48 hs (como por ejemplo un Fondo Común de Inversión).
Fuente: https://www.ambito.com/finanzas/clave-ahorristas-10-tips-reducir-el-impacto-la-inflacion-n5932654