Economistas prevén que el arreglo alcanzado bajará las expectativas de mayor devaluación y estabilizará el mercado cambiario.
Las consultoras Economía & Regiones (E&R) y Delphos Investment evaluaron que el reciente acuerdo de pago de las deudas con los países acreedores del Club de París mejora la perspectiva financiera, tranquiliza el mercado cambiario y frena impulsos inflacionarios.
Para E&R —ligada al titular del Banco Ciudad de Buenos Aires, Rogelio Frigerio— el acuerdo “es un hecho positivo en sí mismo, “porque reincorpora a nuestro país en el sistema financiero internacional, permitiéndonos volver a tener acceso a los mercados voluntarios de deuda y al crédito internacional”.
“El acceso al financiamiento internacional puede impactar positivamente sobre la generación de expectativas, reduciendo las expectativas de devaluación e inflación, contribuyendo a la estabilidad del mercado cambiario”, destacó la consultora.
Considera asimismo que “con un mercado cambiario más estable, habría menos probabilidades que el proceso de inflación se espiralice y la tasa de crecimiento se desplome, minimizándose su efecto negativo sobre el empleo”.
El destino de los fondos. Economía y Regiones advirtió, no obstante, que el impacto positivo del acuerdo y el acceso al financiamiento internacional “depende de qué haga el gobierno con los nuevos dólares que ingresen”.
Para E&R, la posibilidad de acceder a los mercados internacionales de crédito a partir del acuerdo con el Club de París “resultará positiva si el nuevo endeudamiento se destina a financiar las obras de infraestructura necesarias para el desarrollo del país y no para financiar el exceso de gasto corriente”.
Delphos Investment, por su parte, juzgó al acuerdo como “destacable” y sostuvo que donde más expectativas despierta es “por el lado de los préstamos bilaterales”.
Concretamente, señala, “el acuerdo con el Club de París podría facilitar la obtención de algún crédito bilateral por arte del Banco Mundial o el fortalecimiento de las reservas a partir de algún préstamo con algún banco europeo”.
Sin embargo, advierte la consultora, “el volumen que suelen llegar a tener este tipo de financiaciones apenas alcanzaría para compensar los primeros dos pagos realizados” a los acreedores.
Acceso al crédito. En relación al acceso a los mercados voluntarios de crédito, que parecería ser el objetivo final del gobierno, Delphos se declara “menos optimista”, ya que “si bien se trata de una clara señal de acercamiento, entendemos que el conflicto con los holdout es el que determina el piso en el rendimiento de la deuda argentina”.
Un escenario favorable en este sentido —evalúa— implicaría que la Corte Suprema de EEUU pida opinión al procurador antes de tomar la decisión de aceptar o rechazar el expediente argentino.
“Colocar deuda a tasas de entre 7% y 8% anual en dólares sin este problema resuelto no parece probable”, concluye Delphos.
En tanto, el CEO de la banca de inversión Puente, Federico Tomasevich, aseguró que la Argentina podrá salir pronto al mercado de créditos internacional para encarar proyectos de infraestructura e incluso cumplir con vencimientos de deuda, por lo que dejará de depender exclusivamente de sus reservas.
“Somos muy optimistas en que Argentina próximamente estará teniendo ingreso de divisas por la cuenta capital, lo que ayudará a resolver entre otras cuestiones fundamentales la posibilidad de que empresas, provincias, municipios y el Estado nacional puedan financiarse en el mercado internacional de deuda a plazos más largos y a menores costos”, vaticinó.