Hasta ahora los grandes ganadores son los exportadores que, para asegurar un precio a la cosecha gruesa, se hicieron vendedores a futuro y han obtenido precios superiores a lo imaginado
Tal vez esta sea la última semana tranquila del dólar. Las empresas seguirán vendiendo bonos en divisas lo que abaratará el contado con liquidación y el dólar bolsa o MEP, los dólares alternativos que dominan el humor del mercado. Es que a partir del lunes de la semana próxima, deben comenzar a pagar sueldos y aguinaldos.
Además, desde el lunes 21 estarán en circulación el dinero de las jubilaciones y sus aguinaldos. También estarán presentes las compras de los turistas que ven ventajas en el dólar marginal para viajar al exterior ya que tiene el mismo valor que el solidario, que es al que le cotizan los pagos con tarjetas de crédito.
Hasta ahora los grandes ganadores son los exportadores que, para asegurar un precio a la cosecha gruesa, se hicieron vendedores a futuro y han obtenido precios superiores a lo imaginado porque desde que ellos comenzaron a venderse hasta hoy, el valor del dólar futuro bajó y cada centavo que retrocede es ganancia para el vendedor de futuros. En otras palabras, es como si hubieran vendido la cosecha aun dólar más caro que el que pagará el gobierno.
Las señales de que el “verano” del dólar puede estar cerca de su final se vieron el viernes cuando el “blue” o dólar libre recuperó $ 3 y cerró a $ 149. Los dólares alternativos, a su vez, quedaron sin cambios y cortaron un rally sostenido de bajas. Desde su cotización máxima de $ 190 cayeron a $ 142. La idea de Martín Guzmán, el ministro de Economía, de achicar la brecha parece haber encontrado un límite. Si bien logró reducirla en casi 25% los dólares que cotizan fuera del mercado oficial aún están por encima de 70% y ese porcentaje sigue siendo una alerta roja para la devaluación.
Las reservas de libre disponibilidad que están a merced de la base monetaria, es decir de los pesos que pueden comprarlas. La operación matemática indica un dólar reserva de $ 130. Es decir, una devaluación de 51% equilibraría estos dos indicadores. Cabe recordar, que el dólar mayorista, el que se utiliza para comercio exterior, el viernes cerró en $ 86,27. Este desequilibrio, es el que impide que los exportadores se deshagan de sus tenencias porque no les importa tanto que la soja en Chicago haya alcanzado el valor más alto de los últimos seis años, como el tipo de cambio al que van a liquidar sus tenencias.
No es casualidad que en los últimos tiempos se hayan detectado maniobras para liquidar exportaciones por el canal de los dólares alternativos aduciendo que era para pagar deuda con el exterior y amparándose en circulares del Banco Central. Tampoco es ajeno a la brecha y a las retenciones los camiones cargados de soja que se incautaron hace poco tiempo cerca de Posadas, listos para transbordar la carga a barcazas que la iban a cruzar a Paraguay para exportarlas desde allí. Si se incautaron algunos camiones, es porque pasaron muchos. Si la brecha cambiaria fuera corta nadie se arriesgaría a estas maniobras porque el riesgo no compensaría la ganancia.
Pero, más allá de esas maniobras ilegales, la mayoría de los exportadores pasa por el circuito legal y para ellos es importante que la soja siga en alza. En la madrugada del lunes, subía 0,68% en Chicago igual que el maíz. El trigo, cotizaba en equilibrio. Los mercados del exterior, que siempre son referencia para la Bolsa de Buenos Aires y los dólares alternativos, mostraban en las cotizaciones overnite o de futuro, que comienzan a las 19.30, un alza de las principales Bolsas del mundo.
El augurio de los apostadores colocaba al Dow Jones, al S&P 500 y al Nasdaq por encima de 0,50%. Las Bolsas europeas acompañaban ese crecimiento. En Oriente, donde ya estaban operando las Bolsas, el Nikkei de Tokio subía 0,52%, mientras el Hang Seng de Hong Kong perdía 0,20%. Los tres principales indicadores de las Bolsas Chinas, mostraban aumentos de hasta 1%.
También estaban en alza los dos petróleos de referencia en el mundo. El Brent de Europa estaba 0,60% arriba y el WTI de Estados Unidos, 0,52%. El Banco Central puede recibir una noticia no tan buena y es que el oro estaba en baja de 0,22% y el precio afecta a las reservas de libre disponibilidad. Lo que puede compensar este revés, es que el euro, que también integra las reservas, subía 0,18% frente al dólar y la libra esterlina, 0,81%.
Las apuestas de la madrugada, presagiaban una buena rueda para los mercados del mundo y se espera que contagie a la Argentina.