Los depósitos a plazo del sector privado aumentaron un 32,6% interanual. Este porcentaje coincide con los cálculos de la inflación del último año, que rondan el 31%. Aunque se espera que el crecimiento continúe, la tendencia podría perder fuerza a medida que se acerque la elección presidencial y, con ella, la posibilidad de que el próximo gobierno tenga que devaluar la moneda
Los depósitos a plazo fijo en pesos están creciendo a un ritmo más acelerado que en los últimos años debido a que las expectativas de devaluación fueron congeladas, con fines electorales, por la administración kirchnerista.
Según datos del Banco Central (BCRA) al 17 de abril, el incremento interanual del total de los depósitos a plazo es de 20,9%, mientras que el aumento correspondiente al sector privado es del 32,6%. De esta manera, el crecimiento acompañó a la inflación del último año, ya que los cálculos privados ubican al índice de precios en el 31%.
No obstante, cabe aclarar que el nivel de plazos fijos del sector público tuvo una contracción interanual de 9,6%. En la City sospechan que esto es producto de las inversiones que hace la Anses.
«Un ritmo de devaluación bajo y estable en momentos en que se emiten muchos pesos y en que el BCRA introduce pisos a las tasas ?para las colocaciones de hasta $ 350.000 de las personas físicas? implica una ecuación riesgo-rentabilidad atractiva para los plazos fijo de corto plazo», detallaron en Empiria.
Según el informe, «el boom» de los plazos fijos continuaría en las próximas semanas pero tendría fecha de finalización en la segunda parte del año a medida que se acerquen las elecciones y que las percepción de riesgo cambiario vaya en «inevitable» aumento.
Para la consultora, en el segundo semestre del año los ahorristas requerirán mayores rendimientos por sus colocaciones en pesos, en momentos en que, cepo mediante, los bancos no tendrán demasiados incentivos para subir las tasas: «Siendo dudoso que el BCRA incentive una suba de tasas en plena época electoral, la consecuencia será un incremento transitorio en las cuentas a la vista, mientras tanto, los tenedores de pesos buscarán proteger sus ahorro utilizando su pesos de alguna manera». Por su parte, en Econviews y en Orlando Ferreres coincidieron en que en el corto plazo el volumen del plazo fijo seguirá en alza. «Los depósitos a plazo todavía tienen margen de crecimiento», sostuvo el economista de Econviews Kevin Sijniensky.
«Hoy en día lo más conveniente es irse a tasa porque este año no va a cambiar la política cambiaria de devaluación de 1% mensual», agregó Sijniensky. En cuanto a las estimaciones de tasas, Empiria cree que a un mes la Badlar se irá de 20,63% a 20,25% para luego elevarse, en tres meses, a 21%. Para el economista Jefe de Orlando Ferreres, Fausto Spotorno, esta tasa estará entre el 20 y el 23% mientras que en Econviews calcularon que a fin de año se acercará al 24%. Si bien el BCRA está recortando las tasas de las Lebacs, Sijniensky señaló que no le será fácil bajarlas mucho más porque de aquí a fin de año seguirá «emitiendo fuerte», por lo que modificarlas le quitaría atractivo. «Tiene que seguir aspirando para que la base monetaria no crezca por encima del 30% (hoy ronda el 27%), si recorta la tasa los bancos no harán las mismas posturas que vemos hoy en día y la brecha cambiaria estaría en riesgo», especificó. A su vez, subrayó que «todo dependerá de quién se perfile como ganador de las elecciones», dado que meses atrás, cuando las encuestas favorecían a los candidatos de la oposición, crecía la idea de una devaluación para 2016, un pronóstico que fomentó la demanda de dollar link. En tanto, Spotorno prefirió enfocarse en la función transaccional de los depósitos. «Las empresas no puede hacer otra cosa que invertir en plazos fijos», aseguró. «El alza de los depósitos a plazo tiene que ver con la inflación, con el volumen de las transacciones. Es el dinero que las empresas tienen dando vuelta».