Los inversores huyen de los activos de riesgo y las criptomonedas se contagian del «miedo» del mercado tras datos de la economía de EEUU que indicarían una recesión
Las criptomonedas se contagiaron del pánico inversor que inundó las bolsas en el mundo y se llegaron a hundirse más de 25% en las últimas 24hs. Los activos digitales además perdieron casi un 20% de su capitalización bursátil: el Bitcoin llegó a caer más de un 17,20% y tocó mínimos de febrero en u$s49.400. En tanto, Ethereum llegó a perder 23,5% a u$s2.200.
Así, tras una apertura con muchas mermas, las criptomonedas moderaron los descensos; en estos momentos, Bitcoin cae 6,2%, por su parte Ethereum baja 10,2%, y el resto de las altcoins más operadas también registran fuertes pérdidas: Lido Staked Ether (-10,2%), y Ripple (-6,2%), Binance Coin (-5%), y Doge Coin (-4,6%).
Cuál es la perspectiva de los analistas de activos digitales
«Los precios de los criptoactivos caen, pero los indicadores sugieren que estamos cerca de tocar fondo», afirma Simon Peters, analista experto en criptoactivos de eToro.
«Los activos de riesgo cayeron en picada durante la sesión del lunes en Asia, ya que un informe de empleo estadounidense más débil y una mayor tasa de desempleo del viernes, así como una subida del yen japonés tras el reciente aumento de los tipos de interés por parte del Banco de Japón, hicieron que los inversores huyeran de los activos de riesgo», señala Peters.
«La fuerte caída reciente de los precios tanto de las criptodivisas como de las acciones en los últimos días puede atribuirse a una mezcla de factores macroeconómicos y criptoespecíficos, aunque los primeros parecen ser más influyentes en este momento«, coincide Javier García de la Torre, Country Manager de Binance España y Portugal.
«Hablando de criptomonedas en concreto, la caída generalizada del mercado provocada por los temores de recesión ha llevado a la reasignación de capital lejos de los activos de mayor riesgo, con las monedas digitales todavía percibidas en gran medida como tales. Este movimiento se ha visto agravado por la reciente dinámica de la carrera presidencial estadounidense, que algunos participantes en el mercado consideran potencialmente menos favorable para las criptomonedas como clase de activo. Por último, en el mercado de criptomonedas, los meses de verano han sido históricamente más lentos que otros meses del año, con rendimientos sistemáticamente menores. Es posible que esta dinámica estacional también esté entrando en juego aquí», añade García de la Torre.
Las apuestas alcistas en futuros perdieron casi 200 millones de dólares, según muestran los datos de CoinGlass, ya que más de 97.000 operadores liquidaron sus posiciones en las últimas 24. Los largos de ETH lideraron las pérdidas con 55 millones de dólares, seguidos de los largos de bitcoin con 43 millones.
Estos movimientos se producen tras una semana bajista en Wall Street, donde el Nasdaq ha corregido más del 10% desde sus máximos históricos. Las bolsas europeas también caen con ganas, pero los movimientos son hasta discretos si se comparan con el hundimiento de las bolsas asiáticas. El Nikkei japonés se ha desplomado un 13% (su mayor caída desde el ‘crash de 1987’).
La economía de EEUU y el temor a una recesión, afectó a las bolsas del mundo
Como decimos, una de las razones tras esta caída es el temor a que la economía estadounidense se pueda desacelerar tanto que acabe entrando en recesión. En este sentido, el informe de empleo conocido el pasado viernes fue el último dato que puso de relieve la reciente debilidad de la primera economía del mundo. En julio, el mercado laboral estadounidense creo «solo» 114.00 puestos de trabajo, muchos menos que las expectativas del consenso y que el dato previo de junio.
«La narrativa ha cambiado literalmente de la noche a la mañana«, afirma Torsten Slok, economista jefe de Apollo, en unas declaraciones recogidas por ‘Financial Times’.
Según este experto, los inversores están sopesando si la cifra de empleo es una suerte de «capricho estadístico» o si EEUU está entrando «en un periodo de desaceleración más severo». Juan José Fernández-Figares, director de análisis de Link Securities, también señala que esto ha provocado una caída de los rendimientos de los bonos estadounidenses a 10 años estadounidense hasta el 3,80%, «ante la posibilidad de que la economía estadounidense sufra un ‘aterrizaje más brusco de lo esperado’, en vez del ‘aterrizaje suave o no aterrizaje’ previsto con anterioridad».
Algunos analistas también se preguntan si la Reserva Federal (Fed) va demasiado tarde en su proceso de relajación de las tasas de interés y, en consecuencia, provocó esta debilidad de la economía estadounidense. Recientemente, el presidente Jerome Powell advirtió que solo bajarían las tasas en septiembre si los datos mejoraban lo suficiente para dar confianza al banco central, pero ya son muchas las voces que piden a la Fed que baje los tipos en 50 puntos básicos en su próxima reunión.
«El mercado prevé un recorte de tipos de 50 puntos básicos por parte de la Reserva Federal en su reunión de septiembre, lo que creo que será demasiado. La economía estadounidense está mostrando signos de desaceleración, pero no es tan grave como el mercado está poniendo en los precios», subraya Masafumi Yamamoto, estratega jefe de divisas de Mizuho Securities en Tokio.
Por otro lado, los riesgos geopolíticos tampoco están sentándole bien a las bolsas. En las últimas jornadas, algunos de los principales líderes de Hamás y Hizbulá han sido abatidos e Irán responsabiliza a Israel de estas muertes, especialmente de la de Ismail Haniyah, ya que se produjo en territorio iraní. Informaciones de ‘The New York Times’ y otras grandes cabeceras estadounidenses alertan de que Irán podría estar preparándose para atacar Israel de forma inminente.