Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch ya tomaron una decisión sobre la nota que tiene el país y advirtieron por las consecuencias que tendrá sobre el financiamiento del sector privado
Las calificadoras de riesgo confirmarán que el país está en default y que se complicará la recuperación económica si el Gobierno no paga mañana el vencimiento de 503 millones de dólares.
En diálogo con Infobae, las tres principales calificadoras de riesgo internacionales explicaron qué pasos darán si efectivamente el país no realiza el pago de mañana, cuando se cumpla el período de gracia, que, para el ministro Martín Guzmán, es “anecdótico” ya que se extenderán las negociaciones.
Si mañana el Gobierno no deposita el pago -todavía tiene tiempo hoy para pedirle al Banco Central las reservas para hacerlo- la calificadora Fitch reducirá la nota de la deuda soberana a “Default restringido”, según explicó desde Nueva York el jefe de analistas para la región, Todd Martínez.
“Como hemos dicho públicamente, rebajaremos la nota a Restricted Default si no pagan los intereses el viernes o si hay un canje antes, en cualquiera de esos dos escenarios. Si pagan los intereses y siguen negociando, la calificación podría quedarse en C”, anticipó.
“En estos niveles tan bajos de la calificación soberana, esto deja de afectar las calificaciones corporativas y subnacionales directamente; bajarían por riesgos o anuncios propios de default. Por eso el techo del país relevante para todas las calificaciones argentinas se ha mantenido en CCC desde septiembre, a pesar de que la calificación soberana ha ido a default restringido varias veces”, explicó.
Al igual que sus colegas de Standard & Poor’s y de Moody’s, Martínez aclaró que, si hubiera un canje, “aunque fuera voluntario y de buena fe, implicaría una rebaja a un default si involucrara pérdidas para los bonistas. Eso pasó en Uruguay en 2003 por ejemplo”.
Sin embargo, aclaró, “después del canje subiríamos la calificación de nuevo a un nivel compatible con nuestra evaluación de la capacidad de pago del Gobierno en adelante. Dependerá de los nuevos términos de la deuda y las perspectivas económicas”.
Su par Gabriel Torres de Moody’s dijo desde Nueva York que “la calificación no volverá a bajar, aunque el país no pague, porque la nota actual que tiene la deuda argentina asume que, cuando haya un canje, habrá una pérdida para los bonistas del 35 al 65 por ciento”.
Para Moody’s, la calificación argentina está en el “antepenúltimo escalón sobre 22 que hay en total”. En la región, Chile está en el quinto escalón y Perú en el séptimo.
Según Torres, las consecuencias de un default serían que “cuando termine la pandemia, el país va a necesitar inversiones para recuperarse; y esas inversiones llegan de acuerdo al costo de cada país”.
“Detrás de la pandemia está el impacto de la crisis local y en 2021 será más nítido el costo de la emisión monetaria sobre los precios”, indicó.
En tanto, desde Standard & Poors una calificada fuente explicó que la deuda se encuentra en la categoría de “default selectivo” desde hace varios meses y reiteraron que cualquier canje que implique una pérdida para los bonistas es un evento de cesación de pagos. Lo que sí pasará en particular si mañana el Gobierno no paga, es que se les bajará la nota a los tres bonos involucrados.
Para S&P toda la deuda soberana, tanto en moneda local como extranjera, está en default.
La fuente aclaró que, si bien la decisión de no pagar mañana no tendrá un efecto concreto sobre el Gobierno, por la falta de acceso al financiamiento voluntario, puede llevar a que el Banco Central adopte más restricciones sobre el acceso de las empresas al crédito en dólares y eso complique al sector privado. En ese caso, les bajarían la nota a las empresas privadas.
Por lo tanto, consideran que la decisión de no pagar mañana llevaría a transitar un camino muy difícil con vistas a la economía posterior a la pandemia.