El carry pierde atractivo: apenas el 3% de los $ 3700 millones que se colocaron ayer en Lecer fueron suscriptos directamente en dólares. En tanto, la licitación de Lecap, que recaudó $ 30.000 millones se suscribió completamente en pesos. Las Lecer tampoco funcionaron bien entre inversores locales ante la expectativa de una baja de la inflación en los meses próximos
Con el dólar cerca del piso de la banda de flotación, prácticamente no hubo ingreso de inversores extranjeros en la licitación de letras en pesos que realizó el Ministerio de Hacienda ayer. La cartera de Nicolás Dujovne salió a colocar dos instrumentos en reemplazo de las Lebac, que desaparecerán el mes que viene: por un lado, Letras Capitalizables en pesos (Lecap) y por otro Letras ajustables por CER (Lecer).
Según pudo saber El Cronista no ingresaron dólares a la licitación de las $32.560 millones de órdenes de compra recibidas por las Lecap y los fondos extranjeros representaron apenas el 3% de los $3700 millones que se colocaron en Letras ajustables por CER.
El dato contrasta con lo que había ocurrido hace poco menos de un mes, en la última licitación de Lecap. En ese momento, habían ingresado u$s 900 millones directamente en dólares, la mitad de lo que se terminó colocando.
La lectura que hace el mercado es que el dólar ya hizo su recorrido descendente y no queda del todo claro, al menos para los inversores off-shore, si en los próximos meses la tasa real en pesos le va a ganar a la suba del tipo de cambio.
Con todo, los inversores locales sí decidieron apostar por instrumentos en pesos, pero prefirieron uno que pague una tasa fija, ante la expectativa de una inflación a la baja en los próximos meses.
Tal como se preveía en los últimos días, las Letras del Tesoro ajustables por CER, las flamantes Lecer, no consiguieron captar la atención del mercado. Ayer el ministerio de Hacienda colocó $3698 millones en este nuevo instrumento, que vence el 22 de febrero próximo, de los $10.000 millones que estaba dispuesto a licitar.
Según detalló la cartera de Dujovne en un comunicado se adjudicaron un total de órdenes de valor nominal por $3.698 millones, con un precio de corte fue de $978,60 por cada $1.000. Esto representa una tasa nominal anual de 8,85%. Como estas letras ajustan por CER, al momento de su vencimiento pagarán una además la inflación acumulada.
Hacienda explicó que la motivación detrás de la creación de estas nuevas letras responde a «una estrategia global que contempla, entre otros objetivos, el de reducir el número de formatos de instrumentos de deuda pública en el mercado local, y de dotar al mercado argentino de un instrumento vinculado a la inflación, por el beneficio asociado de disponer de una curva que revele los niveles de indiferencia de inflación futura».
«Las ofertas se concentraron en la Lecap a tasa fija y no hubo interés en la emisión con ajuste por CER. El mercado apostó por la desinflación estos meses luego del salto en la dinámica de precios en septiembre y octubre. Si bien son emisiones cortas, el instrumento en pesos tiene la ventaja adicional de presentar mayor liquidez en caso de que el inversor opte por desarmar la posición», explicó el director de la consultora Eco Go, Martín Vauthier.
Así las Letras Capitalizables en pesos (Lecap) se llevaron la atención en la licitación de ayer. Según detalló Hacienda, se adjudicaron $30.000 millones de este instrumento, pero se habían recibido órdenes por un valor nominal de $ 32.560 millones. En este caso, el precio de corte fue de $ 997,19 por cada $ 1000, lo cual representa una tasa de 51,19%. Además, el Ministerio especificó que las ofertas al precio de corte en el Tramo Competitivo se prorratearon por un factor de 94,60%.
Con todo, ni las atractivas tasas a 90 días lograron atraer la misma cantidad de apuestas que hace 30 días. «La mayoría de fondos de pesos que había disponibles por el vencimiento de Lebac terminó yendo a instrumentos más cortos: como caución, plazos fijos y obviamente fondos comunes de inversión. Esto refleja la necesidad de diversificar los plazos por parte de los inversores», detalló Diego Falcone, de Cohen S.A.