La intervención del BCRA, que le pone un techo a la divisa, y una tasa en mercados secundarios en torno a 26,5% para el plazo más corto, hacen que la inversión en Lebac corta vuelve a tener sentido. Ahora, si el dólar superara los $ 20,70 en 28 días, la estrategia se vuelve perdedora.
Los analistas del mercado han venido recomendando el posicionamiento en la parte corta de la curva Lebac, intentando aprovechar el escenario de tasas altas que ofrecen los activos en moneda local. El Banco Central (BCRA) fijó tasa en 26,5% el martes, lo que implicó una baja de 75 puntos básicos respecto de la licitación de febrero. A su vez, el avance del dólar, aun cuando pareciera haber encontrado un techo con las intervenciones oficiales, crea dudas sobre las estrategias de carry trade, esto es desprenderse de dólares para posicionarse en tasa en pesos.
Lo que suele hacer para determinar si la inversión en Lebac resultó una buena (o mala) decisión (intentando aprovechar el carry trade) es, una vez llegado al vencimiento, comparar la tasa que ofreció la Lebac con la evolución del tipo de cambio durante el mismo período. A partir de allí se va a poder determinar si la estrategia resultó ganadora o perdedora en términos de moneda dura.
Según los cálculos de los analistas, para que resulten ganadoras en términos de dólar, el tipo de cambio no debería sobrepasar los $ 20,70 para la parte más corta de la curva a 28 días y $ 24,05 para el tramo más largo a 273 días.
Dado el nivel de tasas y el valor del tipo de cambio actual, para el tramo más corto de la curva, el dólar debe ubicarse por encima de $ 20,68 para que la estrategia de carry trade a 28 días comience arrojar pérdidas. Es decir, la tasa implícita es de 2,03% para el tramo más corto y es lo máximo que el peso debería devaluarse para que las inversiones en pesos durante ese periodo preserven su valor en moneda dura. Para el caso del segundo plazo, a 56 días, el dólar mayorista debería ubicarse por encima de $ 21,10 para que la estrategia resulte perdedora, con una tasa implícita de 4,11%.
En el extremo de la curva de Lebac, el dólar debería cotizar debajo de los $ 23,25 para el vencimiento de 210 días con una tasa implícita de 14,67% y para el tramo más largo a 273 días, la tasa implícita se ubica en torno a 18,75%, es decir, $ 24,05 por dólar para que la estrategia en Lebac ya no convenga en términos de moneda dura.
Hoy en día los analistas del mercado favorecen la inversión en la parte más corta de la curva gracias a que la tasa de interés en dicho tramo resulta la más atractiva. Las tasas de corte se ubicaron en 26,5%, 26,3%, 25,9%, 25,5%, 25,25% y 24,95% para los plazos de 28, 56, 92, 147, 210 y 273 días.
Federico Furiase, Director de Eco Go, Profesor en Maestría de Finanzas en UTDT y Estratega en Arg Markets apunta que luego del salto del dólar desde 17,30 en diciembre a la zona de 20,30 el mayorista hoy, con la señal de intervención del BCRA poniendo «techo transitorio» al dólar mientras se negocian paritarias hasta conectar con la oferta de dólares de la cosecha, y una tasa de Lebac en mercados secundarios en torno a 26,5%TNA para el plazo más corto, la inversión en Lebac corta vuelve a tener sentido.
«Igualmente el inversor tiene que tener en cuenta que estamos en un contexto de presión cambiaria amortiguada por la intervención del BCRA y que una suba del dólar de 41 centavos se come la tasa efectiva de la Lebac de 28 días, por eso es clave estar diversificado con bonos en dólares cortos con un rendimiento de 4,5/5% anual en dólares y bonos CER que rinden 4% más inflación», apunta.
Para cerrar, el economista sostiene que «testeando la película del carry del año, si de acá a fin de año la Lebac corta promedia 24%TNA y el dólar de fin de año es de $23, se puede hacer un carry en dólares anualizado en torno a 7,7% antes de impuestos y comisiones con el roll over de la Lebac corta y lo interesante de esta trayectoria del dólar consiste en que permitiría mantener la competitividad del tipo de cambio real con el dólar ganada, suponiendo una inflación de 20,8% anual a diciembre (consistente con aumentos de salarios en 20% en la punta) y una inflación anual en USA en torno a 2,3% anual.
El analista financiero agrega que el éxito de la estrategia del carry trade va a depender en mayor medida de la voluntad del BCRA para sostener el precio del dólar y permitiendo que el carry siga funcionando.
Claramente hay un cambio en la política monearía a partir de diciembre y en el que se bajaron tasas y el inversor tomó nota de eso y comenzaron a pasarse a dólares, abandonado las estrategias el carry trade. Además dejaron de entrar dólares para apostar a la tasa lo cual te da un canal de ingresos menor al que teníamos antes. Antes teníamos dólares que entraban para ir a tasa y eso se modificó y a partir de ahora se juega un nuevo partido, explica.
Además, Buteler señala que el BCRA mostró la intención de mantener el tipo de cambio pero la duda que se plantea es si va a querer vender $ 1.500 millones cada 15 días para sostener el tipo de cambio ya que esa medida va a terminar generar ruido.
En particular con las Lebac, Bueteler sostiene me gustaron siempre pero hoy en día sería más cauteloso respecto de las posiciones en Lebac porque no está tan claro que la tasa en pesos vaya a ser positiva. En el corto plazo es difícil saber qué puede pasar con el dólar. El BCRA busca que esté tranquilo sumado a que en las próximas semanas deberíamos ver un ingreso de dólares por el campo que permitiría abastecer la demanda.
Finalmente, el analista remarca que su mayor preocupación respecto de las estrategias de carry trade es que los dólares que entraron en su momento para ir a tasa y estrategias de carry vía Lebac se de vuelta y ante ese escenario no ve probable que el BCRA busque que quiera mantener la salida de divisas sin ajustar el precio del dólar.