Varias entidades arriesgaron cifras del próximo ¿salvataje? del FMI a la Argentina que iría de los u$s8.000 millones a u$s12.000 millones. Nueva ponderación
Too big to fail. Demasiado grande para dejarlo caer. De cerrar un nuevo acuerdo, la Argentina pasaría a contar por más del 35% del total de la cartera del Fondo Monetario Internacional (FMI) de un total de 92 países con los cuales el organismo tiene asistencia. Debe contemplarse en la ecuación que, en los últimos años, tanto Egipto, Ecuador y hasta Ucrania recibieron fuertes desembolsos que hoy pesan en el total y reparten la asistencia.
Se sabe: la frase, demasiado grande para… remite a una idea que amaneció en la crisis de Lehman Brothers pero que puede traspolarse. Hay actores, bancos, países que asumen riesgos excesivos en la idea de que son “demasiado grandes para dejarlos caer” y poner en jaque todo un sistema.
El dato es que, una vez más, crece la sombra de la Argentina como deudor del Fondo Monetario Internacional. En las últimas horas, varias entidades financieras comenzaron a arriesgar algunas cifras del próximo ¿salvataje? del FMI a la Argentina. En sólo 60 años, al menos 20 veces la Argentina debió recurrir al organismo.
El aval de los Estados Unidos y el problema de ser «demasiado grande»
En todos los informes, las estimaciones hablan de entre u$s8.000 millones y u$s12.000 millones de fondos frescos que recibiría el Gobierno, sumados a otros recursos que permitirán comenzar a repagar una parte de esos desembolsos. Es decir que el nuevo programa cubriría tanto los pagos de capital como de intereses al FMI durante el resto del mandato del presidente Javier Milei.
A priori, esto implica un aumento de la deuda con el organismo. Al margen de la discusión técnica del “cambio de acreedor” (el Tesoro le repaga al BCRA y lo capitaliza), la resultante es que, como se dijo, para el FMI, y de concretarse la nueva asistencia financiera, la Argentina pasará a superar el 35% de su cartera crediticia, que cuenta por un total de u$s145.446 millones.
De acuerdo a datos oficiales del propio FMI actualizados al día de hoy y calculados por Ámbito, la Argentina le debe al organismo unos 31.000 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG), que es la moneda del FMI o, en rigor, según el organismo, es un “derecho de emisión potencial sobre las monedas de libre uso” de los miembros del FMI. El valor del DEG se basa en una cesta de cinco monedas: el dólar de EE.UU, el euro, el renminbi chino, el yen japonés y la libra esterlina.
De los DEG a los préstamos a Egipto, Ecuador y Ucrania
Al tratarse de una canasta de monedas, cada DEG es el equivalente a u$s1,32. Esto redunda en una deuda actualizada de u$s41.182 millones de la Argentina. A ello hay que sumarle los próximos u$s10.000 millones de fondos frescos (es probable que sean más), lo que arroja 35,18% del total de préstamos de FMI.
En los últimos años, el FMI reforzó sus préstamos a Egipto, Ecuador y Ucrania, lo que había diluido, en parte la gravitación de la Argentina en el total. Por ejemplo, en diciembre del 2024, el Directorio del FMI aprobó la sexta revisión del acuerdo firmado con Ucrania, una decisión dirigida a sostener los esfuerzos bélicos que le otorgó inmediatamente u$s1.100 millones, lo que llevó la deuda con el organismo a los u$s14.686 millones. En el caso de Egipto y Ecuador, la deuda actualizada se encuentra en los u$s10.807 millones y u$s8715 millones respectivamente.
En las últimas horas, de acuerdo con un informe del banco suizo UBS, trascendió que el financiamiento del FMI a la Argentina superaría los u$s12.000 millones, que es la cifra correspondiente a la amortización de la deuda con el FMI en los próximos años. Sin embargo, la entidad estima que podrían sumarse hasta unos u$s8.000 millones adicionales, un número similar a las obligaciones en concepto de intereses de la deuda.
Además de UBS, otros bancos internacionales como Morgan Stanley y Bank of America lanzaron pronósticos con potenciales desembolsos de entre u$s5.000 millones y u$s10.000 millones para 2025, teniendo en cuenta que la Argentina no tiene que realizar pagos de capital al FMI hasta el próximo año.