Ayer se retomaron las transacciones, pero siguen muy por debajo del nivel habitual. El Central busca gastar menos reservas para mantener la brecha en torno al 75%. Coletazo: el blue volvió a subir.
Con un mercado todavía convulsionado por las nuevas restricciones sobre los dólares financieros que dispuso el Banco Central en la noche del jueves, los agentes de Bolsa (Alyc) retomaron ayer muy de poco las operaciones. Aunque, por el momento, prevalecen las dudas entre los operadores, que buscan adaptarse a la nueva normativa. Así, el volumen de transacciones del dólar MEP y, sobre todo, del contado con liquidación (CCL) se mantuvo muy acotado, lo que le facilita la intervención de la autoridad monetaria para mantener a raya la brecha cambiaria por debajo del 75%. Ese era, justamente, uno de los objetivos implícitos de la medida.
La Comunicación A7340 del BCRA estableció que las operaciones de compra venta de títulos que se realicen con liquidación en moneda extranjera deberán iniciarse y finalizar en cuentas bancarias a la vista a nombre del cliente. En los hechos, esto implica que ahora para acceder al CCL o “dólar cable”, que permite sacar divisas del país mediante la compraventa de activos financieros, sí o sí habrá que tener una cuenta bancaria a nombre propio en el exterior. En el caso del MEP, que se utiliza para dolarizarse en el mercado local, las transacciones deberán liquidarse en los bancos.
Como contó Ámbito, uno de los objetivos fue cortar con las maniobras conocidas como “rulos” que se realizaban en las cuentas comitentes de los Alyc y que permitían obtener importantes ganancias al arbitrar, en operaciones sucesivas, las distintas cotizaciones del dólar MEP y el CCL. Estas disparidades se magnificaron luego de que, un mes atrás, la Comisión Nacional de Valores (CNV) limitara el volumen máximo de operaciones en el segmento donde interviene el Central.
Tras un viernes de parálisis en las operaciones cambiarias a través de la Bolsa y transcurrido el fin de semana largo, algunos Alyc empezaron a retomar las transacciones. Otros las mantuvieron suspendidas ante la necesidad de adaptar los sistemas a la nueva regulación, le dijeron a Ámbito distintas fuentes del mercado. Desde un broker, confiaron que habían retomado la operatoria en especie D (MEP) pero todavía no en especie C (CCL). Así, por ejemplo, las transacciones de dólar cable con el bono AL30, el más utilizado, fueron casi nulas ayer. Se operó prácticamente el 5% del volumen habitual. En el MEP sí hubo más movimiento que el viernes, aunque continuó muy por debajo del de los días previos a la medida.
En ese marco, el dólar MEP cerró estable a $169,41. El CCL, que llegó a operar más de 4% arriba, finalmente rebotó 1,2% hasta los $167,27 luego de haber caído 3,4% el viernes. En ambos casos, se hace referencia a la operatoria por pantalla a través del AL30, el segmento donde interviene el BCRA. Las brechas con el tipo de cambio oficial mayorista, que ayer finalizó a $97,25, terminaron en el orden del 72 y el 74% respectivamente. Mientras tanto, el CCL operado a través de acciones (ADR o Cedear) cerró con leves incrementos en torno a los $178 y el dólar Senebi (transacciones bilaterales) cedió 0,5% hasta los $177.
Propósito
Uno de los grandes objetivos del Gobierno es evitar que las típicas tensiones cambiarias preelectorales disparen la brecha cambiaria. Es por eso que el Central interviene en el mercado de bonos para ponerle un techo a los dólares financieros: vende títulos de su cartera contra pesos y los recompra con dólares de las reservas que compra a los exportadores. En los días previos a las últimas restricciones, las consultoras estimaban que la entidad volcaba unos u$s25 millones diarios en promedio, lo que en los próximos cuatro meses auguraba un drenaje de más de u$s2.000 millones de sus arcas.
Con los nuevos límites y un menor volumen operado, el BCRA apunta a gastar menos divisas para contener las cotizaciones. Es un intento por preservar el poder de fuego acumulado a lo largo del año (las consultoras estiman que las reservas netas actualmente rondan los u$s7.000 millones) en meses en los que el ingreso de dólares mermará de forma paulatina por motivos estacionales tras el cierre de la cosecha gruesa.
“El Gobierno trata de mantener una relativa calma en los mercados financieros. Si bien controla el dólar oficial, el CCL se había disparado. Estas medidas son para controlarlo. Son mucho más restrictivas que las anteriores y todavía hay mucha incertidumbre en el mercado”, dijo Gustavo Neffa, director de Research for Traders.
Mercado más acotado
“Se regularizó un poco más la operatoria pero todavía hay dudas lo cual hace que los volúmenes sean inferiores a los normales. Estimo que durante la semana se irá regularizando y adaptando todo a la nueva normativa. Un gran impedimento es que hay que distinguir los dólares provenientes de transferencias de los dólares provenientes de venta de títulos, lo cual requiere adaptar sistemas. Todo eso lleva tiempo. Pero el volumen seguirá siendo más bajo que antes”, señaló Nicolás Rivas, trader de BAVSA.
Pese a que en las últimas horas crecieron con fuerza las consultas para abrir cuentas bancarias en el extranjero, un analista financiero le dijo a este diario que el impacto en el dólar cable “puede ser un golpe permanente porque hay mucha gente operando sin cuenta afuera y el proceso de apertura no es fácil”.
En esa línea, Santiago López Alfaro, presidente de Patente de Valores, consideró que el bajo volumen en el CCL “continuará así”. “Mucho volumen estaba vinculado a arbitrajes y eso ya no se puede hacer. El 99% de los que operaban cable no tiene cuenta bancaria en el exterior porque son minoristas y es un trámite engorroso abrir una. Utilizaban cuentas de los Alyc”, planteó. Aunque consideró que en el caso del MEP sí se va a reactivar de a poco, “cuando la gente vea que se puede seguir operando ya que acá todos tienen una cuenta bancaria”.
Rivas, en tanto, sostuvo que dólar MEP seguirá afectado por el requerimiento de que todas las compras de títulos tienen que provenir de cuentas bancarias. “Eso restringe mucho la operatoria intradiaria, por ejemplo, si uno compra AL30D por la mañana y lo vendo por la tarde, para volver a usar esos dólares tienen que pasar primero por el banco. Lo mismo para pasar de un bono a otro. Es todo muy engorroso. Va a ser más cómodo hacer todas esas operaciones directamente en pesos”, apuntó.
En paralelo, otro coletazo de la medida fue la suba del dólar blue. Luego de avanzar $3 el viernes, ayer sumó un peso más y terminó a $183, el nivel más alto en tres semanas. En un mercado informal muy pequeño y volátil, en el que no puede intervenir directamente el BCRA y donde pocas operaciones mueven el amperímetro, los analistas consideran que esta presión alcista podría sostenerse. “El minorista que hacía transferencias puede terminar volcándose al blue”, señaló López Alfaro.
Aclaraciones
Por otra parte, los agentes de Bolsa continúan a la espera de algunas precisiones sobre ciertos grises que dejó la normativa del Central. Esperaban una comunicación aclaratoria por parte de la CNV, que aún no llegó. Fuentes del ente regulador del mercado le dijeron que, por el momento, no había nada previsto y que probablemente los detalles operativos sean realizados por BYMA.
López Alfaro planteó que las principales aclaraciones pendientes son dos. Por un lado, ¿qué sucederá con las operaciones de cable de los clientes que quedaron “atrapadas” en cuentas de brokers en el exterior y que se utilizaban para invertir en activos, por ejemplo, en Estados Unidos? “La norma dice que solo se los puede transferir a cuentas bancarias a nombre de los clientes pero muy pocos la tienen”, afirmó. Así, las tenencias no se podrían repatriar.
Ante eso, algunos Alyc generaron mecanismos para convertir dólares cable en dólares MEP a la expectativa de que la CNV flexibilice esa traba. Pero hoy por hoy, eso no está permitido.
La otra duda consignada por López Alfaro es qué pasará con las rentas y amortizaciones de dividendos que pagan, por ejemplo, los Cedear (acciones del exterior que se operan desde Argentina). “Dicen que todos los dólares se tienen que transferir a cuentas bancarias pero lo lógico es que se puedan reinvertir. El costo de transferencia muchas veces es mayor que los dividendos percibidos”, señaló.