En un mundo que no parece asimilar del todo las consecuencias del enfrentamiento de EEUU y China, habrá menos crecimiento y más inflación. La Argentina lo va a sentir más que sus vecinos porque está más vulnerable
La respuesta de China a la decisión de Estados Unidos de aumentar los aranceles desde el viernes a 25% a casi USD 200 mil millones, derrumbó a los mercados del mundo y a las monedas y bonos de los países emergentes. En este aspecto la Argentina acompañó la decadencia global no sólo con la suba del dólar, sino con un fuerte aumento del riesgo país.
Pero el problema recién comienza y este inesperado ingrediente en la guerra comercial, puede complicar aún más a la Argentina.
Los chinos no sólo respondieron con suba de aranceles de hasta 25% desde el 1 de junio para productos del agro norteamericano (carnes, frutas, verdura, miel, entre otros) sino que alzaron la voz y dijeron que están dispuestos a seguir este enfrentamiento. Hasta este momento, los chinos habían sido pacientes en las negociaciones y eran los que estaban dispuestos a ceder. Pero esta vez no ocurrió. Además, desoyeron la advertencia de Donald Trump que les dijo que deberían aceptar las sanciones de Estados Unidos sin oposición.
El resultado fue el derrumbe de hasta 3,41% de las bolsas de Estados Unidos, la caída de los mercados de Europa y el precio de las materias primas. La soja perdió 0,70% y el petróleo bajó 1,37 por ciento.
La suba del bono del Tesoro de Estados Unidos, que ahora a 10 años bajó su rendimiento a 2,40% por su mayor valor, y el alza del oro de casi 1%, muestran hacia donde está yendo el dinero de los inversores del mundo.
La aversión al riesgo que va a complicar el plan de ajuste que imaginó Guido Sandleris, en el Banco Central. Si la crisis no se detiene, contener al dólar no va a ser posible con las herramientas actuales.
En la rueda del lunes, lo único que pudo hacer el Central fue jugar fuerte en las posiciones de futuro. Fue un gran vendedor de dólares a fin de mayo y junio. La divisa en el mercado mayorista había llegado a $45,60 y parecía que seguía su recorrido, hasta que apareció el Central. La divisa terminó la rueda a $45,18, un valor que es 28 centavos más elevado que el de la semana anterior.
Los exportadores no estuvieron en el mercado. El monto de negocios indica que hubo escasas liquidaciones. Se operaron USD 689 millones contra 1.012 millones del viernes.
De todas maneras, el Banco Central no se privó de bajar la tasa de interés de las Letras de Liquidez (Leliq) que son la referencia del mercado. Captó $195.711 millones a 71,74% contra 72,05% del viernes. Pero tuvo que liberar $12.000 millones porque no pudo cancelar todos los vencimientos. Ese dinero va a hacer presión sobre el dólar en la rueda del martes.
En bancos y casas de cambio el dólar subió 35 centavos a 46,39 pesos.
Los bonos, en tanto, tuvieron un fuerte retroceso en la paridad. El Bonar 2024, el título de referencia de la deuda, perdió 0,50% a pesar de la suba del dólar. A su vez, la fortaleza del Bono del Tesoro de Estados Unidos hizo que el riesgo país trepara 5,43% a 943 puntos básicos. Una paradoja que se dio en el día en que la Argentina volvía a ser declarada mercado emergente, título que habilita a que determinadas acciones argentinas que cotizan en Wall Street a ser adquiridas por fondos de inversión internacionales.
Pero, si sirve de consuelo, la crisis fue arrolladora para todo el continente. El dólar en Chile subió 1,15%, en México 0,85% y en Brasil 0,05%. Frente a las seis principales monedas del mundo, la divisa de Estados Unidos se revaluó 0,04 por ciento.
Reservas, Bolsa local y ADRs
Las reservas, en tanto, bajaron USD 314 millones a 67.797 millones. Una parte de la caída corresponde a la colocación de los 60 millones diarios del Tesoro que coloca en el mercado en dos licitaciones diarias. Otra parte se explica por la baja de las principales monedas, algo que no pudo neutralizar la suba del oro.
Las acciones con escaso monto de negocios ($530 millones) acompañaron el movimiento del planeta. Las acciones líderes que se agrupan en el S&P Merval, cedieron 3,27%. Cerraron en el mínimo del día. Los bancos, que fueron los que más subieron el último tiempo, fueron los más castigados. Macro bajó 7,36% y Francés 4,72%. Otra baja notable fue la de Cablevisión que perdió 6,19%.
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencias de acciones que cotizan en Wall Street- tuvieron bajas generalizas. Banco Macro (-8,10%), IRSA (-5,24%) y Pampa Energía (-4,14%) fueron los papeles más castigados.
Para la próxima ronda, se espera otra jornada de ajustes. El mundo no asimiló aún todas las consecuencias del enfrentamiento de Estados Unidos y China. Hasta hace dos semanas, imaginaban que en junio iba a estar resuelto el tema. Ahora se preparan para lo peor: menos crecimiento y más inflación.
La Argentina lo va a sentir más que sus vecinos porque está más vulnerable. Fue tanto el impacto internacional que el resultado de la elección de Córdoba, pasó inadvertido para los inversores locales.
Pero de lo que no hay dudas es que el peso se ha vuelto más vulnerable. De hecho, crecen las colocaciones en dólares en los bancos, pero no los plazos fijos en moneda local. Todos en la Argentina ahora están en modo «recalculando».