El Banco Nación comenzó a restringir el uso de cheques y acuerdos de descubierto de cuenta corriente a 60 días, cuando normalmente es a tres meses. De esta forma busca que haga uso de sus granos forzando la venta de los mismos, en un escenario de precios a la baja.
La noticia fue confirmada no sólo por operadores del mercado sino también por el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Horacio Salaverri quien señaló que “se trata de un mecanismo irracional y no conveniente en una entidad creada para apoyar al agro desde lo económico y funcional”.
Puntualmente se trata de poner una limitante del dinero al descubierto (cuenta corriente) y cancelación de cheques, los cuales no deberán pasar del 31 de diciembre próximo. Además también incluye el pago de la tarjeta Agronación a marzo de 2015, usada por los productores para la compra de insumos.
Salaverri sostuvo que esto “es algo que tímidamente se empezó a dar cinco meses atrás en alguna sucursal, pero hoy se hizo masivo”, y “si bien intentamos pedir una reunión con el presidente del Nación, no tuvimos respuesta”. Además trasmitieron la preocupación al ministro de Asuntos Agrarios bonaerenses, Alejandro Rodríguez, pero “se ve que no tuvo éxito”, dijo.
Hoy es sabido que el productor opta por otros mecanismos para financiar su siembra, vende lo mínimo e indispensable.
Es así que apenas comercializó u$s 675 millones por la soja nueva. Esto se da cuando aún falta que ingresen al circuito 21 millones de toneladas de la campaña pasada.
Las divisas por la modalidad de contratos a futuro muestra así una caída del 37%, dado que el año pasado y en la misma fecha se había comercializado u$s 1.072 millones. Y si bien el precio tiene mucho que ver dado que hay 78 dólares de diferencia, el volumen negociado es inferior. Este muestra una baja del 30 por ciento. Cada vez le queda pocos mecanismos para financiarse que no sea más que vender soja