Es la cuarta edición. Obliga a los bancos a colocar $ 20.000 millones en crédito a empresas. Permitirá negociar la tasa con grandes jugadores y dar crédito hipotecario
El jueves, el Banco Central lanzará la cuarta ronda de la “Línea de Crédito para la Inversión Productiva” que obliga a los bancos a usar el 5% de sus depósitos para prestar a tasa fija a empresas. Esta es la primera edición que se lanza con Juan Carlos Fábrega al frente de la autoridad monetaria y trae algunos cambios: establece una tasa fija del 17,5% pero permite colocar la mitad del cupo a una tasa acordada con grandes empresas o dirigir ese dinero a créditos hipotecarios para individuos.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, anunció ayer la inyección de financiamiento productivo por cerca de $ 100.000 millones. Dentro de esa cifra están incluidos $ 20.000 millones que corresponden a la línea de crédito del BCRA que este mes cierra su tercera edición (ya colocó $ 51.000 millones en los últimos tres semestres).
Quedan algunos detalles por definir, pero en la reunión de directorio de este jueves será aprobada.
“Por lo que sabemos hasta ahora, esta versión es un poco más amigable, más a la carta", dijeron en un banco privado.
La tasa del 17,5% supone una suba de dos puntos porcentuales respecto de su versión anterior (aún así, está por debajo del 20% de la tasa Badlar). El plazo mínimo de los créditos será de 3 años.
La principal novedad es que los bancos tendrán más margen de acción, porque podrán imputar hasta un 50% del cupo del primer semestre a préstamos a empresas no incluidas en la categoría de pymes, o sea grandes, a una tasa convenida entre el banco y la firma tomadora de crédito, o a préstamos hipotecarios para la vivienda para individuos, a un plazo mínimo de 10 años.
“Lo que hace esto es liberar $ 10.000 millones para otros usos y para tasas más altas", dijeron en una mesa. "Ya se estaba poniendo difícil encontrar pymes capaces y dispuestas a tomar estos créditos, después de más de $ 50.000 millones ya otorgados”, agregaron.
Destinar parte de ese fondeo a créditos hipotecarios es visto como poco interesante para los bancos privados. Pero entre las entidades alcanzadas por el programa figuran bancos provinciales que se especializan en esas líneas y, al contar con la posibilidad de computar la mitad del cupo con ese fin, terminan siendo liberados. En estos casos, la tasa del 17,5% contará sólo para los primeros dos años, luego aplicará la Badlar más 300 puntos básicos.
La posibilidad de negociar la tasa con grandes empresas para colocar la mitad del cupo es todo un alivio. Eso sí, el Central sólo autorizará esto para destinos específicos como ampliación de capacidad productiva o exportación, la generación de empleo, la sustitución de importaciones, la inversión en bienes de capital u obras de infraestructura.
“En todos los casos terminamos prestando a tasa reales negativas, pero bueno, lo que perdemos por ahí lo ganamos por devaluación: ningún banco tiene menos del 50% de su activo dolarizado”, dijeron en un entidad.