Fuertes vencimientos en el segundo trimestre y el pago del Boden 2015 en octubre harán sufrir a las reservas. El revés judicial, al menos, ahorraría hasta u$s 4.000 millones
El nuevo y duro fallo contra la Argentina del juez Thomas Griesa agrega dudas al objetivo del Gobierno de llegar al cambio de mando presidencial sin ningún sobresalto en el «índice reservas» del Banco Central (BCRA), ya que dificulta seriamente la posibilidad de emitir deuda en el exterior y reestructurar el vencimiento del Boden 2015 que recortará u$s 6.700 millones a las arcas de la autoridad monetaria en octubre de este año. Al menos, los reveses judiciales tienen una contradictoria lectura positiva desde el punto de vista del sostenimiento de las reservas: a fin de año, u$s 2.700 millones en pagos de intereses bloqueados por la justicia neoyorquina permanecerán en la entidad.
Desde que en junio del año pasado la Argentina se vio impedida de pagar u$s 530 millones del vencimiento de deuda de bonos Discount, otros vencimientos de esos y otros papeles (los Global y los Par) elevaron la cifra de pagos incompletos a cerca de u$s 1.300 millones.
La maldición judicial, sin embargo, tuvo al menos una arista positiva para la tarea de mantener contra viento y marea el nivel de reservas: la suspensión de los pagos evitó que ese dinero saliera de las arcas del BCRA.
Según cálculos del Estudio Bein & Asociados, a fin de año los vencimientos que no podrán ser concretados ?siempre y cuando las partes no lleguen a ningún acuerdo que permita concretarlos, o el Gobierno encuentre otra solución? le habrán ahorrado a la entidad conducida por Alejandro Vanoli u$s 2.700 millones. Y eso sólo contando los pagos de deuda ya existente, es decir, dejando de lado nuevas emisiones.
«En realidad, un acuerdo no sólo haría que esos pagos se concreten sino que agregaría nuevos. Nosotros hicimos un ejercicio que estimaba un escenario de acuerdo rápido en el que el Gobierno emitía Bonar 2024 con un recorte de entre 20% y 30% al capital en litigio y eso elevaba los pagos de este año en u$s 1.300 millones más», dijo Martín Vauthier, analista de Bein. «En total, con los pagos bloqueados desde el año pasado y los nuevos que se crearían estimamos que este ahorro contradictorio llega a u$s 4.000 millones», señaló.
Con todo, a pesar del ahorro judicial si se dificulta la posibilidad de reestructurar el Boden 15 o emitir nueva deuda, el sostenimiento de reservas durante este año será muy cuesta arriba. Un informe de M&S Consultores de diciembre del año pasado estimaba en u$s 15.000 millones los pagos de vencimientos que pesarán sobre el país durante todo este año. La cifra suma a los vencimientos de deuda soberana los pagos que deberán hacer también provincias y empresas que, aunque no puedan hacer uso del BCRA tan libremente como el Tesoro nacional, de algún lugar deberán sacar las divisas para concretar el pago.
En el primer trimestre del año todo ese universo de pagos suma u$s 1405 millones según los cálculos de la consultora. El segundo trimestre, aunque coincide con el repunte en el ingreso de divisas del agro, será algo más arduo. Sólo en abril habrá pagos al exterior por u$s 1.660 millones y, en total, la salida por esta vía sería de u$s 3.760 millones.
«A fin de junio, las reservas podrían rondar u$s 28.000 millones (salvo que se activen más cuotas del swap con el Banco de China y se camufle la mayor caída)», aseguró M&S en su último reporte.
Ese será el punto de partida para una segunda mitad del año que aparece como más difícil aún si el Gobierno no consigue alguna forma de financiamiento externo.
En el último semestre, millonario vencimiento del Boden 2015 mediante, los pagos al exterior alcanzarán los u$s 9.835 millones.