El billete quedó $ 16,25 en el postcierre para hoy. Sin oferta de divisas, temen que vaya rumbo a $ 17. De cara a las elecciones, la suba perjudica al oficialismo y le quita posibilidades de ganar en primera vuelta. En las mesas pronostican que le puede quitar al menos un punto valioso a Scioli. Por caída de reservas y aumento de la emisión, el valor teórico del dólar se disparó a $ 20
«Muy caliente y sin vendedores». Así terminó ayer el dólar blue, que aumentó 21 centavos y cerró a $ 16,15, aunque en el postcierre se negoció a $ 16,25 en la apertura para hoy. En rigor, el billete estuvo tan tomador durante toda la rueda que quedaron para hoy muchas órdenes de compra pendientes, que ayer no llegaron a abastecerse por faltante de «físico». O sea, de divisas contantes y sonantes.
Hay riesgo de que si hoy el mercado arranca en torno a $ 16,30 y sin oferta, los negocios de importación paralela, como los que funcionan en el barrio de Once, en las saladas y en las saladitas, busquen acelerar compras, «porque la mercadería va a blue y ellos no han encalzado tanto como meses anteriores. Si la oferta oficial no aparece, esto va derecho a $ 17», pronostican en las mesas.
Desde ya, un billete cerca de$ 17 puede torcer a parte del electorado indeciso.
En la City afirman que le puede robar al menos un punto valioso a Scioli en detrimento de Macri o Massa. Pero en la jornada de ayer hubo mucha conmoción en el mercado, no sólo en el paralelo, sino también en el oficial: u$s 100 millones vendió el BCRA en contado y una venta récord de más de u$s 1000 millones en futuros, donde el Central fue el único ofertante (ver pág. dos y tres). Lo que pasa es que en el mercado informal la tensión se manifiesta en un incremento de precios, pero en el MULC o en el Rofex no, porque el Central interviene, pero la deuda que asume ya es gigantesca.
Lo cierto es que toda la plaza está convulsionada, entrando en un stress cambiario antes de lo esperado. A los importadores que no le dan salida por contado los mandan al Rofex a cubrirse con tasas subsidiadas. Además, las tasas de corto plazo llegaron a 33% y luego salieron a intervenir.
Otro dato a tener en cuenta que augura un recorrido alcista del billete es el aumento en el valor teórico del dólar, que por la caída de reservas (u$s 27.381 millones) y el aumento del circulante ($ 546.000 millones) para financiar el déficit fiscal, se disparó a $ 20. Este dólar cobertura es un termómetro que, desde el cepo, supo seguir en mayor o en menor medida al precio del blue.
Otro de los valores de referencia para el blue es el dólar Bolsa y el contado con liqui, que trepó a $ 14,05, lo que marca valores previos a la «destrucción» de los fondos comunes de inversión dolarizados. En este segmento, el gobierno intervino suministrando oferta de la Anses en el Bonar X que, de lo contrario, estiman que se podría haber disparado a $ 14,30.
Minicorridas barriales
En la rueda de ayer del blue se produjo una suerte de minicorridas barriales: en cuevas de Once, Villa Crespo y Caballito la oferta se comprimió totalmente y saltaron los spreads (diferencia entre la punta compradora y la vendedora) porque se quedaron sin liquidez, esperando billetes que nunca llegaron.
Sucede que le dijeron a la demanda que no pasaría nada porque «la mano oficial» los abastecería, en referencia a cooperativas ligadas a La Cámpora que conseguían dólares al precio oficial a través de DJAIs para revenderlas en el blue a un precio menor que el de mercado. «Ahora que se fueron para atrás por miedo a terminar como La Rosadita, quedamos sin oferta aliada», detallan las fuentes cueveras. «Hay miedo en la plaza de cómo pueda terminar lo de las DJAIs o cualquier otro instrumento que se esté usando para contener al blue. Es muy fácil de investigar auditando al BCRA y los permisos de la Secretaria de Comercio. Además, si alcanzan nombres de protagonistas, se acelera todo. Esto se filtró con fuerza en la plaza y asustó a más de uno: se dieron cuenta que seguir así dejaba escrachados a todos. Un cambista es un cambista, no se va a manchar por unas comisiones que luego lo hundan», se sinceran.