El ingreso de dólares de la cosecha gruesa, más los que ingresan de la mano de fondos de inversión extranjeros, sumados a los que aportan la Nación, las provincias y las empresas por la colocación de deuda pública en divisas
El aluvión de dólares explica el derrumbe del tipo de cambio minorista, el que compra el público en bancos y casas de cambio, que cedió 11 centavos para cotizar a $15,61. El «blue» también padeció el exceso de oferta, pero en una proporción menor, perdió 2 centavos y cerró a 15,97 pesos.
En la plaza mayorista, donde se ve el movimiento más grande porque se negocian los dólares de las empresas y los exportadores, los negocios alcanzaron a USD 450 millones, un considerable monto. La divisa abrió a $15,50 pero no hubo compradores. A las 11.00 cuando las pretensiones descendieron abruptamente a $15,35 apareció la demanda. El cierre fue de 15,3258 pesos, 10 centavos menos que el viernes.
Fue tanto el impacto, que en el mercado de futuros después de mucho tiempo, aumentó considerablemente el monto de operaciones. Predominaron los vendedores de futuro y por eso todos los plazos cerraron en baja. Fin de mayo cotizó a $15,505, perdió 0,93% y fin de año a $17,3881, cedió 1,07%. Todos están corrigiendo sus proyecciones del dólar para fin de año.
Las reservas perdieron apenas USD 1 millón y quedaron en USD 48.215 millones a pesar de que en el exterior a los activos de la entidad no le fue bien. Se perdieron USD 27 millones por la baja del euro. Los únicos pagos que se hicieron fueron USD 3 millones a Brasil para compensar operaciones de comercio exterior.
En el mercado de títulos de la deuda, las operaciones sumaron casi $7.000 millones, una cifra que se ubica cerca de los montos más elevados del año.
El Bonar 2024, el bono en dólares con legislación argentina que se utiliza como referencia, aumentó 0,17%, lo que indica que, al no seguir la caída del dólar, se revalorizó y, por lo tanto, la tasa de retorno cayó. Esto significa una baja del riesgo argentino y un menor costo futuro cuando se salga al mercado a tomar deuda.
Pero la baja del dólar sumó atractivo a los títulos en pesos. El Bocan 2022 que ajusta por tasa Badlar de los bancos privados más 2 puntos, tuvo negocios por $302 millones. Esta tasa es el promedio de lo que los bancos pagan a los inversores de más de 1 millón de pesos en plazos fijos a 30 días. La Tasa el hecho de que el Banco Central mantenga su tasa de referencia en 26,25% anual, atrae más a los inversores que ven que sus ganancias medidas en dólares son astronómicas.
Las Lebac también fueron buscadas y el monto de operaciones en el mercado secundario creció 50%, a 34.502 millones de pesos.
Ganancias selectivas en el panel líder
La Bolsa comenzó con euforia, hizo una pausa durante gran parte de la rueda y en los 45 minutos finales retomó el entusiasmo aunque las alzas fueron selectivas por la baja del petróleo en el mundo.
El índice Merval de las acciones líderes terminó con un aumento de 0,65% y con negocios por 441 millones de pesos.
Las acciones más buscadas fueron las de Mirgor, avanzó 3,72%, una empresa que provee de equipos de aire acondicionado a los autos y de la que Mauricio Macri fuera uno de sus fundadores. La fuerte demanda de automóviles impulsa su crecimiento.
Pampa Energía aumentó 3,57% en la Argentina y 4% en Wall Street, porque después de unos días de tranquilidad fue uno de los papeles elegidos por los fondos de inversión del exterior. Algo similar sucedió con Siderar. La fuerte venta de chapa para los automóviles y la obra pública ayudaron a que este papel crezca 1,29%. En el año aumentó 28 por ciento.
Las bajas más notables correspondieron a las petroleras: YPF casi 2% y Tenaris, 1.03 por ciento.
La llegada de dinero del exterior ha hecho que la pasión por los activos en pesos continúe. Los más conservadores buscan Lebac y los más audaces, acciones.
