El martes el BCRA subió la tasa de referencia a 28,75% y sorprendió al mercado. El dólar ajustó a la baja en el mercado mayorista y eso se plasmó también en las pizarras de bancos. La derrota electoral de Trump también ayudó a la caída de la divisa, que aflojó frente a todas las monedas de la región. Operadores hablan de un nuevo ciclo de apreciación cambiaria
El dólar minorista cayó algo más de 9 centavos ayer para cerrar el día en $ 17,83. La baja de la divisa se dio a la par de un fortalecimiento de las monedas de la región entre las que el peso argentino se destacó como la que más ganó, en un movimiento que los operadores ayer atribuyeron a la sorpresiva suba de la tasa de referencia del día previo y a las señales del Banco Central (BCRA) respecto a una reducción del ritmo de recomposición de reservas.
En el mercado mayorista la moneda estadounidense se desplomó 13 centavos ayer. Cerró en $ 17,52 para la venta, con lo que pasó a perder 0,74% en lo que va de noviembre. En el año acumula un alza del 10,33%, mientras que en los últimos 12 meses suma un 17,17%.
Hubo factores locales y externos que pesaron sobre el dólar. Los operadores se focalizaban ayer sobre los primeros.
«La suba de tasas dispuesta por el BCRA y el anuncio de revisar su política de acumulación de reservas parecieron definir con claridad la tendencia de debilidad que hoy exhibió el dólar», resumió Gustavo Quintana de PR Corredores de Cambio en un mail para sus clientes.
El martes el BCRA subió la tasa de referencia el centro del corredor de pases a 7 días por segunda vez en quince días, para llevarla a 28,75%. El endurecimiento de la política monetaria no estaba en los planes de los operadores y eso se tradujo ayer al precio.
Además, desde Nueva York el presidente de la autoridad monetaria, Federico Sturzenegger, dijo que revisaría su política de acumulación de reservas porque avanzaba más rápido de lo esperado. En las mesas leyeron que comprará menos dólares, o lo hará a un menor ritmo, lo que tendría un efecto bajista para la divisa.
En un banco líder ayer coincidían con la lectura local, pero se mostraban sorprendidos porque la baja de la divisa no haya sido mayor. «Hay que ver lo que pasa en los próximos días, pero los fondos de afuera se mostraron muy tranquilos porque todavía hay riesgos (la confirmación del nuevo presidente de la Fed, el futuro de la reforma impositiva de Trump y otros) que sacar del medio. Nadie se tiró de cabeza», dijeron.
El peso argentino ganó terreno de la mano de la mayoría de las monedas emergentes y de la región. El mal resultado que obtuvo el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en las elecciones del martes pasado disparó especulaciones respecto a mayores dificultades para llevar adelante la agenda de reforma fiscal en el Capitolio. Por eso, el dólar se debilitó en todo el mundo.
El peso colombiano subió 0,22% el real brasileño 0,7% y el peso argentino 0,78%. Fue la moneda que más terreno ganó, pero no sacó grandes ventajas.
«La verdad es que estos días el peso viene correlacionando bastante bien con las monedas de Latinoamérica», dijeron en la mesa de otro banco. «Pero la tasa y el anuncio sobre reservas son más que un movimiento de corto plazo, le ponen un tope al dólar. Es como la confirmación de que el tipo de cambio atrasado llegó para quedarse», agregaron.