El dólar volvió a sumar ayer una nueva caída, de la mano de la presión vendedora de bancos y empresas, que continúan pasándose a pesos como parte de sus estrategias de inversión.
Con fuertes vaivenes y un volumen operado que creció un 22% respecto de la jornada previa, la divisa mayorista cerró a $15,565, 4,5 centavos por debajo del martes. De esta forma, el tipo de cambio ya acumula una baja de 11 centavos en los últimos dos días, la mitad de lo que había logrado recuperar el último viernes, después de tocar un piso el jueves en los 15,46 pesos.
Esta nueva caída se replicó aún con más fuerza ayer en las pizarras, donde el billete estadounidense perdió 10 centavos y culminó en torno a los 15,70 pesos.
“La divisa comenzó a operar a $ 15,60 y fue cediendo su valor por la presión vendedora de los bancos, empresas e inversores, que siguen pasándose a pesos por otros negocios, llegando a un mínimo de $15,48 donde se frenó la caída y los traders recompusieron posiciones”, señaló Fernando Izzo, director de ABC Mercado de Cambios.
Analistas esperan que la debilidad del tipo de cambio se mantenga, mientras sigue la lluvia de divisas producto de las colocaciones de deuda pública y privada. El mercado espera los dólares ahora de la emisión que realizó ayer la provincia de Córdoba, por u$s510 M.