La Mesa de Enlace había asegurado que una medida así sería para "manotear otra caja grande" y que traería consecuencias "superiores" a la generada con la resolución 125.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, descartó hoy que, "por el momento", el Gobierno evalúe la posibilidad de impulsar la nacionalización del mercado granario, una opción que la dirigencia de la Mesa de Enlace criticó por considerar que con ella solo se busca "manotear otra caja grande" con consecuencias "superiores" a la generada en 2008 con la resolución 125.
"No hay, por el momento, ningún proyecto en ese sentido", explicó escuetamente Capitanich en el marco de la ronda matinal de contactos con periodistas en la Casa Rosada, luego de que se conocieran iniciativas de legisladores oficialistas y declaraciones de dirigentes kirchneristas que impulsaban una medida de esas características.
El senador nacional y dirigente de la Federación Agraria, Alfredo de µngeli, sostuvo que una junta reguladora "en manos de esta gente (por el Gobierno), sería como Stalin en Rusia cuando confiscaba".
"Si la hacen, entraríamos en un mercado de intervención", señaló por Radio Ciudad, luego de recordar "cómo nos fue con la leche, con la carne, tenemos la peor cosecha de trigo de la historia por intervenir. Al productor tienen que marcarle reglas de juego claras. Reflotar la Junta Nacional de granos es intervenir los mercados", sostuvo.
En el mismo sentido se expresó el diputado radical Ricardo Buryaile, para quien "en materia agrícola tiene un reloj que atrasa 100 años" y rechazó que la solución sea recrear la Junta Nacional de granos, al advertir que ello implicaría "buscar un conflicto superior al de la (resolución) 125" y considerar que sería "una excusa" para "manotear otra caja grande".
Aunque desde el Poder Ejecutivo y Legislativo se negó que por el momento se vaya a avanzar con el restablecimiento de la Junta creada originalmente en la década del '30, el diputado por Formosa apuntó con ironía que "cuando el Gobierno niega que va a hacer algo, hay que preocuparse".
Buryaile puntualizó, en diálogo con DyN, que la Junta original tenía por fin regular el precio de los granos pero actualmente dijo que "los precios son altos para la producción, el problema es la comercialización".
El diputado sospechó que el Gobierno cree que con la recreación de la Junta "se garantizan las divisas", lo cual desechó y advirtió que "anunciar hoy una Junta Nacional de granos sería buscar un conflicto superior a la 125", por las retenciones al agro que llevaron a un prolongado conflicto con el agro en 2008.
Buryaile, que también es productor agropecuario, señaló que "los exportadores no se quedan con las divisas, se las queda el Banco Central", por lo que calculó que la idea que ronda en sectores del Gobierno tiene por fin "crear una excusa para manotear otra caja grande, como ocurrió con Aerolíneas o YPF, para solucionar los problemas de caja. Pero se van a llevar un chubasco".
En el Congreso hay varios proyectos de ley presentados por el oficialismo para restablecer la junta y este mes la senadora kirchnerista Silvina García Larraburu presentó una iniciativa con igual objetivo.
En 1933, el gobierno de Agustín Pedro Justo creó una agencia denominada Junta Reguladora de granos, la cual en 1946, es trasformada durante la presidencia de Juan Domingo Perón en el Instituto Argentino de Promoción del Intercambio (IAPI); que luego en 1963, por orden de José María Guido, se transforma en la Junta Nacional de granos, que en 1991 fue disuelta por el presidente Carlos Menem.