Fuentes oficiales anticiparon que se mantiene la tendencia lograda en enero y que los ingresos todavía no reflejarían la retracción del nivel de actividad; qué pasará en los próximos meses
El Gobierno confía en lograr otro buen resultado fiscal en febrero por el ajuste del gasto y una recaudación que se mantuvo en un buen nivel pese a la retracción del nivel de actividad.
Calificadas fuentes oficiales indicaron a Infobae que el proceso de reversión del déficit fiscal del año pasado se mantiene por el buen camino. Así lo destacará también mañana el presidente Javier Milei en su discurso ante el Congreso Nacional.
“Seguimos bien. Hay control del gasto por las medidas de ajuste y los recursos se mantienen en un buen camino”, señaló la fuente en relación al resultado primario, tras el superávit logrado en enero.
El mes pasado, el Sector Público Nacional (SPN) registró un superávit financiero de $518.408 millones, producto de un superávit primario de $2.010.746 millones y del pago de intereses de la deuda pública neto de pagos intra-sector público, que alcanzó los $1.492.338 millones. “Es el primer superávit financiero desde agosto de 2012, y el primer superávit financiero en un mes de enero desde 2011″, destacó el Ministerio de Economía.
Al respecto, la fuente oficial destacó que “la cuenta de intereses de febrero es más baja que la de enero, así que seguimos en el camino trazado”, por lo que se podría repetir también el superávit financiero.
Pese a que varias mediciones privadas indican que en enero hubo una retracción del nivel de actividad y consumo –como Scentia, que registró una caída del 10% el mes pasado- por ahora esta caída no se reflejó en la recaudación tributaria. En particular, se mantienen en buen ritmo los ingresos tributarios por el IVA DGI y el impuesto a los créditos y débitos bancarios.
Respecto de la recaudación del comercio exterior, sigue firme el impuesto PAIS, los derechos de exportación se mantienen en línea, pero los derechos de importación caen este mes.
Tras el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI) manifestado la semana pasada –y ratificado ayer por la jefa del organismo, Kristalina Georgieva al ministro Luis Caputo- las autoridades del equipo económico se sienten reconfortadas.
“Con el Fondo muy bien, están apoyando”, sostuvo la fuente.
Además, las autoridades económicas destacaron que la deuda flotante, que quedó en un altísimo nivel con la gestión económica anterior, “baja en términos nominales”.
En este marco, el banco Itaú destacó en un informe de análisis el resultado de las cuentas públicas de enero,
“Los ingresos tributarios cayeron en el cuarto trimestre de 2023, liderados por menores impuestos a las exportaciones y menores ingresos por impuestos a la renta. La recaudación de impuestos cayó un 11,7% interanual en términos reales en el período, después de caer un 6,6% en el tercer trimestre debido principalmente a menores impuestos a las exportaciones, lo que refleja los efectos persistentes de la grave sequía. Los ingresos totales también disminuyeron un 7,7% interanual en el período (-8,2% interanual en el 3T23)”, indicó.
“El gasto primario disminuyó en términos reales en el cuarto trimestre de 2023. El gasto primario cayó un 3,7% interanual en términos reales en el trimestre finalizado en diciembre, en comparación con una caída del 3,4% interanual en el tercer trimestre”.
“Los pagos de jubilaciones cayeron un 16,9% interanual (-6,8% interanual en el 3T23), afectados por la aceleración de la inflación, mientras que los gastos de capital cayeron un 21% interanual en el período (-3,6% interanual en el 3T23). Los subsidios a la energía disminuyeron un 10,4% interanual, en comparación con una caída del 41,7% interanual en el tercer trimestre”.
Por otro lado, “los gastos en programas sociales aumentaron un 27,5% interanual, las transferencias a las provincias crecieron un 32,3% interanual y los pagos de nómina aumentaron un 11,3% interanual en términos reales, en el contexto del último período previo a las elecciones presidenciales”. Sin embargo, aclaró que hay “una consolidación fiscal desafiante en 2024″.
“El gobierno está implementando un fuerte ajuste fiscal, con el objetivo de lograr un saldo fiscal nominal equilibrado en 2024 (el saldo fiscal nominal alcanzó el 6,1% del PIB en 2023, por encima del 5,2% estimado por el gobierno en diciembre). Las directrices proporcionadas por las autoridades se centran principalmente en recortes de gastos y menos en medidas de ingresos”, sostuvo el banco brasileño.
Por el lado del gasto, “se reducirán los subsidios a la energía y al transporte, se congelarán los gastos de capital y las transferencias a las provincias serán las principales áreas de ajuste”.
Por otro lado, sostuvo que “las medidas de ingresos incluyen mayores impuestos a las importaciones y exportaciones, la reversión de la reciente reforma del impuesto a la renta y un blanqueo fiscal”, entre otras.
“Esperamos una cuenta fiscal primaria equilibrada (0% del PIB) en 2024, menos ambiciosa que las estimaciones oficiales que apuntan a un déficit fiscal nominal equilibrado (la factura de intereses de la deuda asciende a alrededor del 3% del PIB). En nuestra opinión, el programa muestra una hoja de ruta hacia la consolidación, pero su implementación probablemente será un desafío, considerando que más de la mitad del gasto primario está relacionado con pensiones y asistencia social, que parecen especialmente difíciles de recortar bajo el actual panorama estanflacionario”, concluyó el banco Itaú.