La intención del BCRA es poder acordar que la “zona de no intervención” crezca a un ritmo menor en el primer trimestre de 2019
Para la mayoría de los analistas del mercado local el final del año financiero tendrá que lidiar con tres incógnitas. A saber: si el Banco Central reducirá la tasa de interés del 60% anual de referencia, si la entidad monetaria cumplirá con las previsiones de emisión monetaria establecidas en el programa del FMI y si bajará la inflación a partir de este mes.
«Creo que la primera condición habrá que analizarla con el resultado del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que difundirá mañana el BCRA. La mayoría de los analistas descuenta que por segundo mes consecutivo, esa encuesta muestre una reducción del el IPC esperado para los próximos 12 meses y si baja la inflación se podrá seguir reduciendo la tasa de interés», le dijo a Infobae el director de Invertir en Bolsa Norberto Sosa.
Hay que destacar que el BCRA adoptó a partir de octubre un nuevo esquema de política monetaria de estricto control de agregados monetarios, comprometiéndose a no aumentar hasta junio de 2019 el nivel de la Base Monetaria (BM), respecto al promedio mensual de septiembre.
De acuerdo a un informe elaborado por el BCRA en noviembre, el promedio mensual de la Base Monetaria fue de $1.256 mil millones, $14,5 mil millones por debajo de la meta y $4 mil millones por encima del promedio del mes de octubre. El informe destaca que de la BM con respecto al mes de octubre se explicó por el aumento de $15 mil millones en los encajes bancarios no-remunerados, parcialmente compensado por la reducción en la circulación monetaria de $11 mil millones.
El informe agrega que para cumplir con su meta, el BCRA subasta diariamente letras de corto plazo, las Leliq, cuya tasa de interés es determinada endógenamente por el mercado.
Ayer, por ejemplo, el Central subastó ayer unos $160.231 millones en Leliq con un rendimiento promedio en baja al 60,278% anual. El máximo adjudicado en las letras a siete días de plazo fue de 60,49 por ciento. La tasa de referencia actual es la menor desde que se empezó a utilizar este instrumento de absorción de liquidez exclusivo para bancos el 1 de octubre. En una operación similar realizada el jueves, la autoridad monetaria había avalado una tasa de corte promedio del 60,753% y una tasa máxima del 61,026 por ciento.
Al respecto Sosa explica que «en un contexto de mayor estabilidad dentro de la plaza cambiaria, el Central deberá continuar en diciembre con la estrategia de política que viene implementando desde hace dos meses para mantener un equilibrio entre el dólar y la tasa de interés». Si bien el economista destaca que hay que tener en cuenta el salto estacional de diciembre por el pago de aguinaldo y vacaciones, estima que el BCRA no va a tener una situación complicada como la de la semana pasada ya que la economía no necesita demasiados pesos
Rodrigo Álvarez, de Analytica, cree que «el impacto de la crisis cambiaria de a poco está comenzando a reducir su efecto sobre la inflación, que según estimaciones oficiales anotó una fuerte desaceleración en noviembre, cerrando por debajo del 3%, contra el 6,5% de septiembre y el 5,4% de octubre, aunque todavía persiste en niveles elevados y lo importante será ver si el Central bajará las tasa de interés y si se cumplirá en diciembre la meta de expansión monetaria acordada con el FMI».
De acuerdo con los números oficiales, la banda de flotación cambiaria para este mes comenzó en la banda inferior a $36,139 y en la banda superior a $46,769, pero terminaría el año entre los $37,117 y $48,034, ya que la autoridad monetaria se comprometió con el FMI a fijar una zona de no intervención con un crecimiento del 3% mensual entre octubre y diciembre, casi en línea con la inflación (exceptuando el dato de octubre), con el fin de evitar una nueva apreciación del tipo de cambio.
La intención del BCRA es poder acordar que la «zona de no intervención» crezca a un ritmo menor en el primer trimestre de 2019, ya que apuesta por una fuerte desaceleración de la inflación y para el último bimestre, el Gobierno espera una suba en los precios promedio del 3% mensual, cerrando en noviembre por debajo de este nivel, aunque en diciembre se ubicaría por encima. Además, a diferencia de la banda actual, el ajuste no será de forma mensual, sino que pasará a ser trimestral.
«Uno de los elementos clave para estabilizar el tipo de cambio desde octubre fue la utilización de las Leliq para esterilizar los pesos excedentes a partir de tasas de interés atractivas, que llegaron a alcanzar un tope cercano 73%, pero que ya han caído en más de 10 puntos y actualmente rondan el 60% (el viernes cerraron en 60,75%», explicó Sosa.
Para diciembre se espera que la tasa de Leliq caiga por debajo de este piso, siempre y cuando no haya algún shock negativo que lo impida. De todas formas, uno de los elementos clave para ver cómo continúa esta política será el número que cierre el Banco Central para la evolución de la zona de intervención.