En un mes que combinó un tipo de cambio estable con malos datos de inflación y un alza de la tasa de política monetaria, los inversores locales sumaron bonos en dólares a sus carteras. Las mayores subas se registraron en los títulos a más largo plazo. Los bonos con CER y Badlar sufrieron por la suba de tasa que realizó el Banco Central y perdieron su atractivo para hacer carry trade.
Los bonos en moneda dura fueron los que más subieron durante abril. El Par Ley Argentina (PARA) lideró las subas, con un avance del 7,34% en el mes. Miguel Zielonka, de la consultora Econviews, explicó: «En la parte larga de la curva, los bonos en dólares reaccionaron positivamente por un mayor apetito de riesgo de los inversores globales. La más clara manifestación de eso es que el riesgo país medido por el EMBI tocó 398 puntos básicos la semana pasada, el nivel más bajo desde 2007».
Casi todos los bonos soberanos en dólares mostraron alzas en abril y los mejores desempeños se notaron en los títulos a mayor plazo. El Argentina 2046 (AA46) y el Discount Ley Argentina (DICA) subieron 5,31% cada uno; el Discount Ley Nueva York escaló 5,18%; el Bonar 2027 (A2E7) registró un avance de 4,81%; y el Argentina 2026 (AA26) sumó un 4,78%. Al momento de justificar los movimientos positivos en la parte larga de la curva, Tavelli y Cía. consideró que se explicaron por «la reinversión del Bonar X y la entrada de dólares producto del blanqueo».
En cambio, Nicolás Chiesa, senior trader de Balanz Capital, opinó: «El grueso de los dólares provenientes del blanqueo ya se gastaron. Hoy, los inversores del exterior demandan bonos en dólares. Antes, se creía que afuera solamente se buscaban bonos en pesos para hacer carry trade pero eso cambió y los fondos del exterior ven desarbitrajes en la parte larga de la curva y se ubican allí. Por otro lado, con este tipo de cambio, aun los que son compradores de pesos, no están comprando ni vendiendo pero sí los veo volcándose a los títulos en dólares».
Entre los bonos en pesos, los que ajustan por CER tuvieron comportamientos dispares en abril. «En la parte larga, el Par (PARP) continuó comprimiendo spreads, en parte por la mejora del perfil crediticio de Argentina. Los más cortos, como el TC20 y el TC21 elevaron los rendimientos exigidos, es decir que bajaron precios», indicó Manuel Terré, economista de Delphos Investment. El especialista agregó: «El comportamiento de la parte corta se debió al alza de la tasa del Banco Central (BCRA) como respuesta ante un período más inflacionario de lo que se esperaba. En ese contexto, la inversión en bonos con CER para hacer carry trade en pesos, ya no es adecuada porque conviene más posicionarse en tasa».
Sobre los Boncer, Chiesa comentó: «A pesar del mal dato de inflación, siguen sin subir demasiado. El mercado continúa confiando en el BCRA. Para mí, siguen siendo muy atractivos porque no creo que el dato de inflación de abril vaya a estar por debajo del 2%».
El alza de la tasa de referencia de la política monetaria también repercutió entre los bonos con ajuste por Badlar. «En los primeros meses del año habían bajado los spreads que estos títulos ofrecen por encima de la Badlar, porque había mucha demanda. Eso respondió en parte a que estaba cayendo la tasa de la Lebac contra la Badlar. Cuando el BCRA comenzó a tener una política más restrictiva, se amplió ese diferencial que se había comprimido», afirmó Manuel Terré. En cuanto a lo que pueda pasar en mayo, el economista de Delphos especuló: «Si esperamos que la actitud del BCRA sea la misma hasta fin de mes, cuando empezaría a verse una caída más importante de la inflación, los inversores seguirán yendo hacia las Lebac. La inversión en Badlar puede tener más relevancia después de mayo».
Por el lado de los bonos en pesos a tasa fija, el TO26 resultó ser el más operado durante el mes de abril y anotó un alza del 5,85%. Manuel Terré señaló que, en líneas generales, estos títulos tuvieron «una leve caída en sus rendimientos». Y completó: «Es posible que se hayan visto influenciados por una mayor confianza sobre la consecución de los objetivos de inflación del BCRA».