Los seguros contra un default argentino se dispararon este año y la probabilidad implícita de un impago en el próximo lustro ya asciende a 85%. Los Credit Default Swaps (CDS) comenzaron 2014 en 1.638 puntos, pero en el transcurso de un mes escalaron 41%, para terminar enero en 2.820 puntos básicos.
La fuerte suba de estos seguros se reflejó el 27 de enero cuando los CDS alcanzaron los 2.665 puntos, cuatro días después de que el Gobierno devaluara el tipo de cambio un 15%, la mayor depreciación desde 2002. De hecho, esta escalada explica el 38% de la suba de los CDS en enero. Aunque en la primera semana de febrero comenzaron a caer levemente y ya se ubican en los 2.376 puntos, un 15% abajo.
Los economistas consultados argumentan que las probabilidades de un impago para 2015 aumentaron debido a la posibilidad de que las nuevas medidas no logren contener la inflación y el drenaje de reservas. ?La falta de confianza en el Gobierno actual, combinada con un marcado deterioro de las variables financieras y macroeconómicas produjo fuertes ventas de bonos argentinos y la compra de los CDS, es decir, protección contra default. Esta es la descripción simple de algo que todos sabemos y no hay nada nuevo en esto?, explicó Jorge Piedrahita, socio de Torino Capitals, con sede en Nueva York. Para el especialista, a la devaluación ?le hace falta más?, la suba de tasas es insuficiente y los temas fiscales e inflacionarios siguen sin atacarse seriamente.
Cabe aclarar que a pesar de la suba que experimentaron en el último mes, los CDS están todavía lejos de los precios máximos que alcanzaron en noviembre pasado, cuando el juez Nueva York Thomas Griesa ordenó a la Argentina pagar u$s 1.330 millones a los holdouts, al mismo tiempo que lo hacía a los acreedores que participaron en reestructuraciones.
En diálogo con El Cronista, Alberto Bernal, analista de Bulltick, explicó que los CDS subieron porque el mercado está percibiendo más riesgo frente a la caída de reservas, aunque aclaró que no espera un riesgo de default. ?Yo no he cambiado mi visión sobre este crédito, no veo ningún evento de deuda ni nada parecido?, agregó Bernal.
Los sucesivos fallos adversos que tuvo la Argentina en la justicia norteamericana, sumados a la cautela de los inversores en relación con la política económica del Gobierno en la primera parte de 2013, habían derrumbado los bonos argentinos y disparado a los CDS a máximos históricos, superando los 4.000 puntos. Pero con las elecciones legislativas, la perspectiva de un cambio político en el mercado impulsó a los títulos y contribuyó a la caída de los CDS en la zona mínima de los 1.600 puntos, nivel que se mantuvo hasta fin de año.
Ahora, pareciera ser que el riesgo percibido no se da tanto por el tema de la deuda, sino por la evolución de la economía local y regional. ?La devaluación del peso se dio en un momento en que la Fed está recortando los estímulos monetarios, con aumentos de tasas de interés en el mediano plazo. La contrapartida es la salida de dólares de los mercados emergentes y el riesgo país ya es un poco más alto en la región?, explicó Mauro Morelli, analista de Rava Sociedad de Bolsa.
En tanto, los títulos públicos en el exterior, que habían bajado bastante durante el mes de enero, quedaron muy atrasados en sus rendimientos y comenzaron a rebotar. ?Se trató de una baja mas bien artificial por fuga de dólares al exterior?, explicó Morelli. De acuerdo a la agencia Bloomberg, los costos crediticios del país llegaron al nivel más alto en 19 meses. Los rendimientos de los bonos de la deuda que vencen en 2017 treparon 7,3% este mes y tocaron 19,28% esta semana. ?Los globales de Argentina bajaron un promedio de 13% este año, la mayor cantidad entre 65 países en vías de desarrollo que analizó JPMorgan.