Los aportantes serían fondos de Inglaterra y Estados Unidos que tienen poca exposición a Argentina y la quieren aumentar. La idea es no convalidar en absoluto tasas de dos dígitos
En el Gobierno evalúan retomar la operación de canjear el Boden 15, ya que en octubre deberán pagar u$s 6.700 millones por este bono, cifra que representa más del 20% de las reservas del Banco Central. Aunque la opción más firme que se baraja es emitir u$s 3.000 millones para el Bonar 24. Los aportantes serían fondos que tienen poca exposición a Argentina y la quieren aumentar. "El momento exacto lo determinará el mercado. La idea es no convalidar bajo ninguna circunstancia tasas de dos dígitos y que no haya ningún banco de inversión en el medio. Retomar la operación de la vez pasada, pero con mejores condiciones de mercado", advierte Agustín D’Attellis, referente de la agrupación kirchnerista La Gran Makro, quien adelanta que en estos momentos se están intentando cerrar líneas de financiamiento adicionales con China y Rusia: "Esto ayuda a ir capeando la escasez de divisas de 2015".
Lo cierto es que, desde la operación anterior, que tuvo un mal timing por factores externos, el mercado espera un nuevo intento de emisión, que le daría más espacio de maniobra al gobierno llegando a octubre. En Economía van a apuntar a una tasa no mayor a 10%, en lo posible cercana a 9 o 9,5%.
"Para que la operación sea exitosa, es necesario que grandes hedge funds de Estados Unidos y Londres entren, y para eso se necesitaría un banco internacional como intermediario. De hecho, se están armando fondos dedicados a Argentina, a quienes les sería ideal poder comprar grandes bloques, algo que en el mercado no pueden hacer por la baja liquidez. Y entre un grupo reducido de fondos se podría juntar un buen monto. El interés existe, y el Gobierno es consciente de eso", revela un broker. "La caja está, no por el gobierno, sino por un cambio de escenario sobre Argentina. Eso lo saben: lo tienen que aprovechar, sin ventilar que eso es mérito de que están terminando su mandato", dice uno de los grandes agentes de bolsa.
Alejo Costa, jefe de Estrategia de Puente, ve limitado el canje de Boden 15 por Bonar 24: "La mayoría de los tenedores están cómodos con hacer una ganancia en 2015, para eso lo tienen justamente. Además, sin un intermediario, sería compleja la operación local para que participen los fondos del exterior".
En la City coinciden con esta postura: "Necesitan que alguien aporte el capital localmente, que compre a cuenta de sus clientes, y que arme un libro para que los fondos del exterior puedan participar. El tema es si Axel puede vencer sus prejuicios anti mercado y hacer una colocación contratando uno o más bancos colocadores que le garanticen un piso de aceptación".
El pago de Boden 15 debería ser, de todas formas, al menos parcialmente financiado con endeudamiento a un plazo más largo. Hasta mediados de abril, la dinámica de las reservas sería negativa, con lo cual si no se hace una emisión en el primer trimestre, lo más probable es que se traslade a septiembre u octubre. El jefe de una mesa de dinero cree que el gobierno podría estar más preocupado por la necesidad de pesos, y más confiado en la dinámica de la balanza de pagos para hacer frente a los vencimientos en dólares. Son concientes que el swap con China es alquimia contable: un alquiler de dólares que sirve para contener expectativas. El problema es que desde el lado de la balanza comercial las noticias no van a ser tan buenas. La búsqueda de un nuevo canje sería para disipar cualquier riesgo de corrida.