Las reservas netas son negativas en más de USD 13.000 millones y en los próximos meses esperan nuevos vencimientos de deuda
No es una novedad que las bajas reservas de dólares son un dolor de cabeza para el Gobierno nacional. La sequía, la caída de algunos precios internacionales y el atraso cambiario -ocasionalmente compensado por el dólar agro- han impactado durante todo el año en el ingreso de divisas, mientras que los compromisos de deuda y las intervenciones del Banco Central en los mercados financieros estimularon la salida de dólares.
Lo interesante en este contexto, es analizar cuánto cayeron efectivamente las reservas en lo que va del año. Según un informe de Quantum, en el transcurso del 2023-datos al 21 de septiembre- el BCRA perdió USD 17.256 millones de reservas, principalmente por: pagos netos a organismos internacionales por USD 5.277 millones, USD 3.776 millones de otros pagos netos del Gobierno –en gran medida servicios de deuda- y disminución de la liquidez que los bancos tienen en el BCRA como contrapartida de los depósitos en dólares.
Además, el BCRA efectuó ventas netas en el MULC por USD 1.766 millones y los especialistas estiman que el Banco Central utilizó más de USD 3.200 millones para intervenir en los mercados libres de cambios.
“En mayo de este año comenzó el proceso de dolarización que en oportunidades antecede a los procesos electorales. En agosto el proceso se aceleró y para enfrentarlo, el BCRA intervino vendiendo divisas en los mercados libres, con un promedio diario de intervención de USD 51 millones, tendencia que continúa en lo que va de septiembre, aunque con una intervención algo menor”, apuntaron.
Desde la consultora, encabezada por el economista Daniel Marx, explicaron que la dinámica de reservas sigue bajo tensión y, si bien el Gobierno va incorporando versiones de tipos de cambio “a medida” para intentar contener las presiones, el escenario crítico podría profundizarse.
“Los incentivos a liquidar divisas se reducen a medida que transcurre el tiempo y se acerca el desenlace electoral. En estas circunstancias los stocks de reservas brutas y netas siguen en niveles bajos”, analizaron.
Cuentas en rojo
Desde Quantum explicaron que, en una definición parcialmente restrictiva de las reservas netas -incluyendo oro y posición de reservas del FMI- desde fines de abril de este año los valores son negativos. “Es una tendencia que se profundiza a pesar del desembolso que hizo el FMI a fines de agosto”, advirtieron.
En detalle, el informe señala que al 22 de septiembre existían reservas brutas informadas por USD 27.204 millones, pero si a ese valor se le restan los USD 17.779 del swap de monedas con China, USD 3.818 millones de oro, USD 4.624 millones de posición del FMI, USD 50.30 millones del Banco de Pagos Internacionales y Sedesa, más otros USD 9.488 millones de liquidez de depósitos en dólares, se obtiene un valor de reservas netas líquidas de -USD 13.535 millones.
Panorama delicado
En vistas a lo que resta del año, el escenario sigue siendo complicado. Los factores de pérdida casi sistemática de reservas se combinarán con vencimientos de deuda pública, principalmente con el FMI.
En efecto, la consultora repasó que en octubre de este año habrá vencimientos de capital con el organismo internacional por USD 2.657 millones, que, junto a vencimientos con otros organismos internacionales y algunos de deuda soberana, suman un total de USD 3.144 millones.
Para afrontar los vencimientos con el FMI de ese mes y los de noviembre y diciembre, que en total suman USD 4.219 millones, el BCRA tiene DEGs por el equivalente a USD 4.600 millones, que al utilizarse reducirían las reservas netas.
En contraparte, se debe recordar, está programado un desembolso del FMI en noviembre de USD 3.300 millones, aunque para los analistas es difícil pensar que se materialice antes de la renegociación que efectuarán las autoridades nacionales que asuman el 10 de diciembre próximo.
Además, en enero hay un nuevo vencimiento de capital con el organismo por USD 1.967 millones y alrededor de USD 1.600 millones de vencimientos de intereses de la deuda reestructurada en 2020.
Los desembolsos previstos en todo 2024 en el actual acuerdo con el FMI son sólo de USD 3.200 millones (DEG 2.400 millones). “Obtener nuevo financiamiento de ese organismo será uno de los temas que deberá afrontar inmediatamente el nuevo gobierno”, opinaron los especialistas.