Emitirá un bono atado a la divisa por el equivalente a US$ 400 millones, a 6 años de plazo.
La ciudad de Buenos Aires se dispone a emitir un bono en pesos ligado al tipo de cambio oficial por unos 2.400 millones de pesos. Y lo hará en medio de la acelerada devaluación del peso frente al dólar. De entrada, la Ciudad está dispuesta a asumir los riesgos que significa emitir una deuda que se irá ajustando a la par de la devaluación, justo cuando el Gobierno Nacional apuesta a achicar la brecha entre el dólar oficial y el paralelo.
Esto quiere decir que la tasa de interés a la que se emita el bono (se calcula en un 2 o 3 % anual) es irrelevante.
Lo que importa es el precio del dólar a la hora de pagar los vencimientos, tanto los intereses como el capital. Como el peso se está devaluando a una tasa, anualizada, superior al 50%, el costo de tomar esta deuda en pesos para la ciudad es equivalente a esta tasa de devaluación.
Según explicó ayer el ministro de Hacienda de la Ciudad, Néstor Grindetti, la emisión se hará a 6 años de plazo con tres de gracia.
Es decir que el pago de intereses arranca en el mes 37.
En el mercado aseguran que los tres años de gracia no son un problema para los acreedores. Más tiempo pasa para el primer pago, más chances de capturar toda la devaluación esperada.
Ante el riesgo para las arcas porteñas (y los contribuyentes) de endeudarse por el mecanismo dollar-linked en medio de una devaluación más o menos intensa, Grindetti señaló: “La devaluación, tarde o temprano, provoca cierta inflación, y eso luego se traduce en mayor recaudación para la Ciudad por Ingresos Brutos e IVA, con lo cual los riesgos se acotan”. Otros especialistas dicen que si bien eso es cierto, la caja de la Ciudad tiene que estar fuerte para soportar ese lapso entre la devaluación y su impacto en la recaudación. Los tres años de gracia servirían también como colchón para amortiguar ese impacto.
Emitir deuda en pesos ligada al tipo de cambio oficial es la manera que encontraron las provincias de conseguir fondos en los mercados.
Las que mejor están cubiertas con esta estrategia son las provincias que tienen sus ingresos directamente vinculados al dólar, como las que cobran regalías petroleras. En su caso, el tipo de cambio es indiferente porque tanto el pasivo como el activo (sus ingresos por regalías) crecen a igual ritmo.
De hecho hasta el propio Banco Central está a punto de emitir deuda dollar-linked para tentar a las cerealeras a que liquiden dólares.
En el caso de la Ciudad, la intención de Grindetti es tener fondos frescos para poder cumplir con la regla presupuestaria de destinar cerca del 20% de los recursos a gastos de infraestructura.
Fuente: http://www.clarin.com/politica/devaluacion-Macri-lanza-deuda-dolares_0_1046295387.html