El dólar y la Bolsa tuvieron una derrota aplastante frente a los Bonos del Tesoro, las Lebac y las colocaciones a plazo fijo en moneda nacional
Fue un mes de transición. De acá en más, los inversores estarán más exigentes a la gestión del Gobierno. Una muestra de la cautela es que no se abalanzaron sobre las acciones a pesar de la media sanción de la reforma tributaria y previsional, ni de las mejores calificaciones de Moody’s.
En el último día del mes, el dólar al público -el que se vende en bancos y casas de cambio- perdió 7 centavos y cerró a $17,63. El «blue», a su vez, se derrumbó 14 centavos a $17,96. En el mes perdió 1,10%, lo que es notablemente inferior a la caída de 1,73% de la divisa que compró el público. Si a esto se le agrega la brecha entre precio comprador y vendedor, los ahorristas perdieron algo más de dos por ciento.
El dólar «hoy», el que se negocia en el mercado mayorista, abrió a $17,50 y no pudo sostenerse. Al cierre cotizó a $17,3845 y quedó 4 centavos por debajo del día anterior. Un verdadero derrumbe. En el mes bajó 1,56 por ciento.
Las reservas del Banco Central perdieron USD 94 millones y quedaron en USD 54.568 millones. A lo largo del mes, subieron USD 2.772 millones, una muestra de la atracción de los pesos. Fondos de inversión y deuda tomada por el Estado, las provincias y empresas, fueron las responsables de la suba de las reservas.
Los bonos de la deuda operaron $8.890 millones. El Bonar 2024, el bono de referencia, cedió 0,05%. En cambio, los Bonos del Tesoro tuvieron subas de hasta 1% como fue el caso del Bonte 2021. Las Lebac negociaron casi $30 mil millones en el mercado secundario. No es para menos, la tasa siguió en alza. En el plazo más corto, el de 19 días, la tasa subió 0,15 puntos a 29,35% anual. Al empezar el mes el rendimiento era de 28,30% anual.
Por supuesto, que los que apostaron a las Lebac fueron los grandes ganadores. Los que hicieron plazo fijo a 30 días ganaron hasta 2% en el mes, por lo que su ganancia en dólares es más elevada. Si se compara a dos ahorristas, uno que compró USD 1.000 dólares el último día de octubre y gastó $17.940 con otro que vendió la misma cantidad y los pesos los colocó a 30 días, a fin de noviembre con la tasa que ganó se compra USD 1.037. En otras palabras, el que apostó al peso ganó 3,7% en dólares.
Los accionistas tuvieron contratiempos. El índice Merval de las acciones líderes terminó de manera opaca el mes. Quedó casi neutro porque subió apenas 0,01% con negocios por apenas $367 millones. Es una señal de que los inversores están a resguardo. No modifican sus carteras. Esta neutralidad hizo que la Bolsa perdiera 3,7% en noviembre.
Desde julio, que el Merval no bajaba. De todas maneras, es la mejor inversión del año porque el promedio de las líderes acumula ganancias de 60 por ciento.
La cautela de los inversores, habla de un diciembre que no va a ser tranquilo. Hay demasiadas incógnitas antes de asumir nuevos riesgos.
