En julio, la emisión monetaria para financiar al fisco se mantuvo en niveles similares a los del expansivo junio. La diferencia fue que el BCRA aspiró prácticamente cada peso que emitió. De acuerdo a cuánto dure el default, se espera que en lo que queda de año se transfieran entre $ 100.000 millones y $ 135.000 millones más
En julio, mientras la pulseada con los fondos buitres desencadenaba un default por vía judicial, el Banco Central (BCRA) volvió a la política monetaria cautelosa de principios del año.
En base a datos parciales del mes pasado, el viernes se conoció que la entidad conducida por Juan Carlos Fábrega esterilizó unos $ 12.000 millones que compensaron casi en forma perfecta los $ 11.500 millones que emitió para financiar al Tesoro en el mismo período.
Ante la posibilidad concreta de un cierre en las vías de financiamiento como resultado de la cauda judicial en Nueva York, el Central fuerza las colocaciones de Lebac antes de la temporada alta de trasferencias al sector público de cada final de año.
Datos actualizados hasta el viernes 25 de julio muestran que durante ese mes la esterilización de pesos a través de letras y notas se movió casi exactamente a la misma velocidad que la emisión para financiar al Tesoro.
Tras un mes de junio en el que el financiamiento al sector público había resultado expansivo en $ 12.511 millones (y las licitaciones semanales de letras y notas no habían aspirado un solo peso, ayudando a una expansión monetaria de $ 21.000 millones en el período), el mes de julio mostró un BCRA mucho más preocupado y a la vez más exitoso en mantener a raya el circulante.
Gracias a ese esfuerzo, la expansión de la base monetaria está en el 14% interanual, después de haber llegado al 37% en diciembre pasado.
“El esfuerzo de esterilización es claramente mayor que en junio”, dijo Juan Manuel Pazos, economista del Estudio Broda. “El tema es que buena parte de la contracción monetaria está dada por pases, que no dependen de decisiones del BCRA sino de los bancos (y están muy atados a que el crédito anduvo muy mal en el mes) y que más adelante el Central no va a poder esterilizar 100%”, agregó.
Según un informe de la Fundación Mediterránea, los préstamos al sector se desaceleraron en julio. Los créditos bancarios en pesos pasaron de crecer 2,1% intermensual en junio a sólo 0,7% el mes pasado. “la desaceleración obedece al comportamiento de las líneas de consumo (Personales y con Tarjeta). Estos préstamos -que han sido el motor de la expansión crediticia en los últimos años llegando a representar el 38% del total de préstamos al sector-, pasaron de crecer 1,3% intermensual en junio, a caer 2,4% este mes”, detalló el informe.
La parte del año estacionalmente más expansiva para el crédito y para el financiamiento al sector público todavía falta llegar (es, más bien, el último trimestre del año) y coincide con la de mayores necesidades de financiamiento del sector público.
El Estudio Broda trabaja con una estimación de emisión para financiar al Tesoro en lo que queda del año que va de $ 100.000 millones a $ 110.000 millones si el default es corto y de $ 125.000 a $ 135.000 millones si es largo, una expansión de la base de entre 28% y 33% en el año.