La búsqueda de cobertura cambiaria por parte de los inversores institucionales ante la cercanía de las elecciones presidenciales, a lo que se suman los futuros baratos que facilita el Banco Central (BCRA), llevó a un récord histórico el monto de contratos abiertos en Rofex.
Según datos del mercado de futuros de Rosario (Rofex), estaban abiertos contratos por u$s 5.497,59 millones al viernes pasado. La cámara compensadora se asume como compradora y vendedora de los operadores. Hoy del lado vendedor está principalmente el BCRA, ya que ningún privado querría vender seguros de cambio ante las altas expectativas de devaluación en un próximo gobierno.
Según contaron los operadores, los privados están aprovechando las coberturas baratas respecto de la devaluación esperada, debido a las ventas de contratos que realiza el BCRA para pisar las expectativas de devaluación. (Los NDF en Nueva York a tres meses rinden un 29% y los futuros locales, un 19%.)
En tanto, compañías y fondos comunes de inversión arman los llamados sintéticos: compran un bono en pesos, como el Bonac que emite el gobierno y que rinde 27,8% anual a marzo próximo, y lo calzan con un futuro al mismo plazo, que rinde un 24%. Obtienen un rendimiento nulo o una pequeña ganancia en dólares.
Se suma a los dollar-linked, que al permitir captar la eliminación de la brecha cambiaria, hoy rinden negativo. (Al mismo plazo, un título de la Ciudad de Buenos Aires rinde -4,54%.)
El plazo con más contratos comprados es el primer trimestre de 2016, cuando el mercado estima que el próximo presidente hará los ajustes cambiarios. Según Rofex, en enero hay contratos abiertos por u$s 825,9 millones; en febrero, por u$s 713,2 millones, y en marzo, por u$s 1.206,4 millones.
La cantidad de contratos explotó en agosto. Hoy implican un alza de 39,47% respecto del mismo mes del año pasado, cuando también se había alcanzado un pico de u$s 5.007 millones, en un contexto en que el tipo de cambio también estaba retrasado
«Los contratos abiertos son las posiciones concertadas, que no están vencidas ni han sido canceladas por la realización de una operación inversa. Los compradores para cancelar la posición tienen que vender un contrato equivalente o aguardar al vencimiento de la posición, que se liquida en base al valor de referencia para el dólar para el día de vencimiento del futuro», dijo Marcelo Comisso, jefe de Research de Rofex. «El interés abierto es la suma de todos los contratos abiertos a una fecha determinada», agregó.
El mercado aprovecha los futuros baratos que provee el BCRA. Según calculó la consultora Nicolás Dujovne, la posición vendida por la entidad monetaria para posiciones entre diciembre 2015 y marzo 2016 es de u$s 7.400 millones. Y sumando los contratos que vencen entre abril y julio de 2016, asciende a u$s 9.500 millones (u$s 4.400 en Rofex y u$s 5.100 en MAE). Y estima que si el Central sigue subsidiando la operatoria de futuros locales, ese monto trepará a u$s 15.000 millones.
La pérdida que generen los futuros vendidos si la tasa de devaluación fuera superior deberá ser pagada mediante emisión monetaria. Por eso algunos operadores temen que el próximo gobierno manipule la Comunicación «A» 3500, y evite pagar los contratos vendidos.