El mercado local acumula una suba del 40% en dólares este año, mientras que los bonos en moneda dura recuperaron el 100% de la caída del último trimestre de 2016
El mercado local acumula una suba del 40% en dólares en lo que va del año y el Merval se ubica en zona de máximos históricos en 1400 dólares a la vez que los bonos soberanos en moneda dura lograron recuperar el 100% de toda la caída sufrida en el último trimestre de 2016 y muestran una reducción del spread de más de 100 puntos básicos en lo que va del 2017, sobre todo en el tramo más largo de la curva. A la hora de mirar hacia adelante, se pueden sacar conclusiones sobre cuáles pueden ser los drivers que empujarían al mercado a continuar con la racha alcista actual mientras que también se pueden identificar amenazas.
Drivers positivos
1 Factor político local.
Uno de los factores más importantes a la hora de operar los mercados (y sobretodo los mercados emergentes) es el político. Con una victoria en las PASO y con la potencial consolidación de dicho resultado el octubre, el mercado vislumbra no solo dos años más sin un peronismo, sino también un periodo mucho más amplio en el cual se puedan llevar a cabo reformas estructurales similares a las que está llevando a cabo Brasil. Con lo cual, pensar en ocho años sin peronismo lleva a pensar que el potencial de la bolsa y de los bonos locales aún tiene margen para continuar con las subas.
2 BCRA – Crecimiento local -Brotes Verdes
Tener un Banco Central enfocado en reducir la inflación y en busca de generar una mayor demanda de crédito entre los agentes invitará a un crecimiento del sector lo que posterior permitirá evidenciar mayores beneficios para el rubro de la construcción y los demás sectores relacionados con él. Contar con un rubro de la construcción que puede volver a traccionar permitiría pensar en un crecimiento económico sostenido ya que de dicho sector dependen otros rubros que viven de mismo y que pueden generar mayor empleo y dinámica a la actual recuperación de la economía argentina.
3 Calificación a emergentes
Tras la victoria en las PASO de Cambiemos, el mercado recordó rápidamente las exigencias de MSCI para poder recalificar a Argentina de nuevo a emergentes siendo el factor político una de las claves por las cuales sufrimos el bochazo a comienzo de este año. En línea con una victoria en octubre y en ocho años sin peronismo, el mercado piensa en los beneficios que podría traerle desde el lado financiero y económico a argentina el ser re-categorizado como país emergente y abandonar el grupo de frontera. En ese contexto, los bonos y acciones locales aún podrían tener mayor up-side si se piensa en un futuro up-grade de argentina hacia emergente.
4 Brasil.
Las acciones de Brasil muestran un año y medio de recuperación sostenida, especulando con un mayor crecimiento económico y fin de la recesión. Efectivamente, con un Banco central efectivo en la búsqueda de controlar la inflación y con indicadores económicos que vienen mostrando síntomas de crecimiento en la inversión y consumo, son factores que pueden empujar a los activos brasileros y a los locales. Un crecimiento de nuestro principal socio comercial será favorable para argentina, permitiendo mayores ventas y transacciones entre los países y permitiendo especular que tal escenario sea capitalizado por las acciones y bonos locales.
Drivers negativos
1 Ampliaciones de capital
Uno de los factores que muestra la existencia de un mercado en valores elevados es las distintas ampliaciones de capital llevadas a cabo por empresas cotizantes en la bolsa local. Banco Macro colocó acciones por u$s 670 millones. El Grupo argentino Supervielle, que controla el banco Supervielle, incremento su capital accionario en 453,2 millones de dólares y el argentino Grupo Financiero Galicia también lanzó una oferta de acciones por 620 millones de dólares. En la misma línea, El Banco Francés emitió nuevas acciones con cerca de u$s900 millones.
Este proceso de nuevas emisiones en un escenario de mercado alcista lleva a pensar que las distintas entidades financieras y cotizantes aprovechan los precios altos de las acciones para capitalizarse. No toman esta decisión en momentos en donde las acciones están en valores deprimidos sino más bien todo lo contrario y este tipo de datos suele marcar que grandes participantes del mercado ven a los precios de las acciones en niveles elevados.
2 Ganancia acumulada
El Merval en pesos acumula un avance del 1030% desde los mínimos de 2012 y un 40% en dólares en lo que va de 2017. Los bonos en dólares lograron comprimir sus spreads en más de 100 puntos básicos en lo que va del año y se ubican en zona de máximos históricos. Con lo cual, una potencial toma de ganancia podría golpear a las acciones y bonos argentinos llevándolos de regreso a niveles inferiores antes de continuar con la escalada alcista. De hecho, dicho avance prácticamente que no ha tenido descansos intermedios. En particular el Merval en pesos lleva una racha prácticamente sin descanso desde comienzo de 2016, sin generar ajustes mayores al 10%.
3 Baja volatilidad en EE.UU.
Finalmente, uno de los factores que preocupa al mercado local e internacional es el nivel actual de los índices de volatilidad en EEUU, operando en mínimos históricos y alejados de su promedio natural. Dado que los índices de volatilidad suben cuando el mercado cae y que, generalmente el mismo opera revirtiendo a la media, verlos en mínimos y lejos de su promedio implica un riesgo para las acciones en EE.UU. Una caída en las acciones americanas provocara mayor volatilidad en el resto de los mercados, con amenazas correctivas para emergentes en general y a argentina en particular. El factor internacional con la baja volatilidad, los ataques terroristas y las tensiones geopolíticas en aumento son factores que amenazan la continuidad de la suba delos activos locales.
4 Suba de tasa de la Fed y el rally de la 10Y
La Reserva Federal de EE.UU. ha iniciado su ciclo alcista, colocando a la tasa de interés de referencia en el rango de 1,00-1,25% y se esperan mayores subas en las próximas reuniones. Si bien se puso en duda una tercera suba de tasas para este 2017, el sesgo contractivo de la política monetaria ya marca una tendencia sin retorno, lo que implica mayores riesgos para las economías emergentes, vulnerables a los vaivenes de los flujos de capitales internacionales. De todos modos, si bien muchos alertaron sobre los riesgos negativos de una suba de tasas, las economías emergentes iniciaron un ciclo de recuperación en 2016, en el mismo momento en que la Fed inicio su política de tightening, a la vez que las acciones mostraron mejores retornos que el SP500.