Tarifas que continúan congeladas y una «moderación» en la actualización de algunos precios son las variables que explican un crecimiento del IPC por debajo de lo que se calculaba meses atrás.
Las consultoras privadas estiman que la inflación de agosto se ubicará por debajo del 3%. Así se reflejó, también, en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) difundido por el Banco Central el viernes pasado, donde los analistas proyectaron una suba en el Índice de Precios al Consumidor en el orden del 2,7%. El dato, si bien evidencia un marcado incremento en relación al 1,9% de julio, también exhibe una aceleración menos intensa que la prevista meses atrás: en mayo, por ejemplo, se esperaba un 3,3% para este periodo del año.
Las proyecciones entre las consultoras privadas tienen leves variaciones. Mientras que para el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), la inflación de agosto se ubicó entre el 2% y el 2,1%, para Orlando Ferreres la suba fue del 2,7%. Dentro de esos márgenes, se ubican Ecolatina y EcoGo (2,6%) y Analytica (2,5%).
Los analistas consultados por el REM revisaron sus proyecciones a la baja para los próximos meses. Así, el 2,7% proyectado para agosto su ubica 0,3 puntos porcentuales por debajo de la encuesta previa. También se realizó una corrección a la baja para el acumulado anual de 2020, cuyo nivel general alcanzará el 37,8%, un 1,7% menos que la prevista en julio. De hecho, en el relevamiento que realizó el BCRA en junio se esperaba también un 3% para agosto y el 40,7% en el acumulado anual. En el de mayo, en tanto, la proyección para el octavo mes era del 3,3% y del 43,3% anual.
“Si hubiéramos hecho una hipótesis en abril o mayo sobre cuál iba a ser la inflación a esta altura del año, esta (por debajo del 3%) hubiera sido una hipótesis definitivamente optimista: que este deshielo de la actividad se dé sin un rebrote inflacionario considerable. La inercia va a seguir estando, pero es una inercia cada vez menos persistente. Una inercia que se va apagando. Si en agosto estuviera por debajo del 3%, de hecho va a implicar una nueva desaceleración interanual, así que el desafío para el último cuatrimestre es mantener esta dinámica. A este ritmo se terminará el año en un entorno del 30%, lo cual es sumamente importante”, sostuvo a Ámbito Sergio Chouza.
Al explicar los motivos, el economista detalló: “En agosto hubo parte del arrastre de la última parte de julio de la actualización de Precios Máximos y Precios Cuidados, que pega parcialmente en agosto. Y esa fue la actualización más considerable. Hoy está jugando muy favorablemente el congelamiento de todos los servicios, incluido el no aumento que se iba a dar en telecomunicaciones (que igualmente iba a pegar en septiembre). Pega parcialmente el efecto de naftas, creo que ese rubro explica un 2% de forma directa en el IPC, con lo cual con algún efecto indirecto de segunda ronda, tal vez esté adicionando entre 0,3% y 0,4% en un primer mes. Pero la verdad es que en alimentos se ve una moderación, no se ve un descalabro ni mucho menos. Las actividades que se empiezan a descongelar y vuelven a retomar su oferta, abren con correcciones pero no son correcciones sumamente dramáticas”.
“Mi estimación es que la inflación anual va a ser 35%”, señaló a este diario Hernán Letcher, director del CEPA, quien explicó: “Las tarifas de servicios públicos mantendrán el congelamiento hasta finales de año. En el caso de las comunicaciones, también se mantiene el congelamiento. El precio de las naftas se incrementó 4,5% en promedio, pero este aumento se realizó en la segunda quincena, por lo cual tuvo un impacto parcial. En el caso del transporte, se mantendrá el congelamiento hasta fin de año. Respecto al dólar, en virtud de los controles cambiarios existentes no se estima que pueda haber un impacto sensible en su variación”.
Fuente: https://www.ambito.com/economia/inflacion/estiman-27-agosto-se-acelera-menos-lo-previsto-n5131177