El título que vence en 2021 rinde 8,43% y está por debajo de lo que algunos consideran como su precio razonable, en relación al Bonar 2024, cuya tasa ronda el 7,55%
La temporada de emisiones corporativas fue inaugurada el viernes pasado por YPF con la colocación en el exterior de un bono por u$s 1000 millones, el cual pagará cupones a una tasa de interés del 8.5%.
Pero el diferencial de rendimiento con respecto al soberano se ubicó rápidamente en unos 25 puntos básicos por debajo de su valor razonable, lo que para algunos supuso que el título perdió atractivo.
Según Elypsis, por el amplio interés de los inversores que realizaron ofertas por u$s 3000 millones y el acierto de recurrir a los mercados antes del soberano, la tasa del bono de YPF que vence en 2021 se ubicó el mismo viernes en 8,38%, unos 135 puntos básicos sobre la curva soberana.
Pero desde la consultora estimaban su precio al menos unos 160 puntos básicos sobre la curva soberana bajo ley argentina, por lo que el spread ya no se ve tan tentador, dados los precios actuales.
El rendimiento del título de YPF se ubicó ayer en 8,43% mientras el Bonar 2024 casi se mantuvo sin cambios desde el viernes, y cerró en 7,55%. En la nueva etapa del preacuerdo del gobierno nacional con los holdouts, el rendimiento del título pone un techo al financiamiento sobre el pago a los holdouts, dijo Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global.
«Si lo comparas con otros bonos corporativos, el corte no es tan atractivo. Si se compara con petroleras regionales, los de Petrobras rinden más que YPF con otro tipo de riesgo. Creo que una tasa en torno al 8,40% es atractiva para un mundo de tasa cero o negativa y con emergentes con buena calificación crediticia rindiendo entre 4y 5%», agregó.
El segundo corporativo que también decidió evitar al gobierno nacional como competidor en los mercados fue IRSA, que con la emisión de un bono por u$s 360 millones a 2023, obtuvo una tasa de corte del 9%, como parte del plan de extensión del perfil de su deuda. A través de esta colocación, la compañía planea recomprar a fin de mes parte de sus deudas a 2017 y 2020.
Según un informe del Banco Ciudad, a esta primera ronda de colocaciones, que también incluye a la emisión de u$s 1250 millones de la provincia de Buenos Aires, podrían llegar a sumarse en el transcurso de los próximos meses, otras emisiones de deuda provinciales por aproximadamente u$s 5000 millones, que se agregarían a las liquidaciones de dólares del complejo agroexportador previstas para el segundo trimestre, por más de u$s 7000 millones.
A su vez, en el ámbito corporativo se espera que más compañías coloquen bonos en el exterior, sobre todo aquellas que tienen la capacidad de emitir u$s 200 millones o más. Algunas ya están sondeando a los mercados y pronto podrían concretar sus planes antes de que el soberano inunde el mercado con papeles argentinos.
El foco deberá estar puesto en las empresas que tienen que refinanciar deuda este año, sobre todo aquellas que tengan deuda con cupones altos, como es el caso de Edenor. Otras que podrían salir pronto son Arcor, Raghsa, TGS o Banco Macro, entre otras.