El mínimo no imponible pasaría del actual de 15.000 pesos a un valor entre 18.000 y 20.000. El jefe de Gabinete confirmó que está en estudio toda la estructura de la tasa, pero aseguró que no hay plazos establecidos
El objetivo es claro: evitar que el creciente malhumor social provoque mayor tensión. En esa línea, y luego del paro de Moyano y Barrionuevo el jueves pasado, la Casa Rosada confirmó que tiene en estudio aplicar cambios en el Impuesto a las Ganancias a fin de que las mejoras salariales no sean en parte absorbidas por el gravamen.
Tras convalidar paritarias con aumentos entorno al 30%, lejos de las pretensiones del Ejecutivo del 25% como deseaba originalmente, ahora estaría dispuesto a elevar el mínimo no imponible de Ganancias entre un 25 y un 30 por ciento, publica el diario La Nación.
De aplicarse ese incremento, el piso de salarios por encima del cual los contribuyentes quedarían eximidos del gravamen pasaría del actual de 15.000 pesos a un valor entre 18.000 y 20.000 pesos.
"La Presidente (Cristina Kirchner) pretende que los aumentos salariales surgidos de las negociaciones paritarias de este año no repercutan en una ampliación del universo de trabajadores de la cuarta categoría que paga el impuesto", aseguraron fuentes oficiales al matutino.
"Hay que cuidar el modelo. Esta medida es promodélica: la rebaja del impuesto se trasladaría al consumo", confió otro funcionario. Tras la devaluación de enero y la disparada de los precios, varias actividades comenzaron a verse resentidas como alimentos, autos y electrodomésticos, mientras que otras se mantienen como la construcción. El temor de la Rosada es que se produzcan despidos.
Luego de la última suba del mínimo no imponible, en septiembre de 2013, se determinó que los asalariados solteros o casados que ganan en bruto hasta $15.000 dejan de pagar el impuesto. A partir de $15.001 hasta $25.000 pasan a tributar Ganancias, aunque la base de cálculo para los solteros pasó de un piso no imponible de $6939 a $8326,8 y para los casados con 2 hijos pasó de $9597 a $11.516,4.
Para los solteros o casados que ganen más de $25.000 brutos siguieron sin variaciones: el soltero sigue con el piso no imponible de $ 6939 y el casado con 2 hijos mantuvo los $ 9597. O sea, aunque pagaban impuesto los que ganaban más de $ 15.000 brutos, el cálculo para fijar el pago era en todos los casos inferior a los $ 15.000.
"La apuesta es que no haya pérdida del poder adquisitivo en el salario pactado para que no haya baja de consumo y de actividad económica que repercuta sobre el empleo", aseguró al diario un allegado a Cristina Kirchner. En esa línea, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, confirmó ayer que está en estudio toda la estructura de la tasa, pero aseguró que no manejan plazos para su modificación.