El dólar bajó sólo un centavo a $ 25,54. Pero se operó menos en el mercado cambiario, con lo cual al Banco Nación le alcanzó con vender u$s 150 millones para calmar a la divisa. El mercado cambiario sigue tutelado por el BCRA.
El dólar bajó un centavo ayer para cerrar en $ 25,54, muy cerca de su máximo histórico, en un día en el que las acciones mostraron una recuperación y los bonos soberanos terminaron con alzas promedio del 1,5% en el exterior. Aunque lejos de haber superado las «turbulencias» que causaron una corrida cambiaria en abril y mayo, los inversores locales hablaban ayer de un mejor clima dadas las expectativas de la cercanía de un acuerdo con el FMI. La calma en el mercado financiero local contrastó con devaluaciones de las monedas de la región.
El dólar en el mercado mayorista bajó también un centavo a $ 24,96, en una rueda en la que el Banco Nación vendió unos u$s 150 millones y el Banco Central (BCRA) mantuvo su oferta de u$s 5000 millones a $ 25 para evitar una disparada, además de hacer ventas en el mercado de futuros. Pero aunque el precio siga atado de pies y manos por estas intervenciones, ayer en las mesas de los bancos hablaban de un día positivo por un volumen operado normal, lejano a la convulsión de la semana pasada, sumado a las alzas de acciones y bonos.
«Fue un día positivo, en comparación con lo que veníamos viendo», dijo un operador de un banco. «En general la noticia de que un acuerdo con el FMI por u$s 40.0000 millones más otros u$s 10.000 millones de otros organismos no es poco, aunque no esté confirmada», agregó.
En el mercado cambiario mayorista se operaron u$s 640 millones, mientras que en el mercado de futuros Rofex se pactaron contratos por u$s 670 millones. La semana pasada esas cifras estaban cómodamente por encima de los u$s 1000 millones diarios, en parte por el repunte normal de las operaciones cada fin de mes pero también por la incertidumbre cambiaria que se mantenía acallada sólo gracias a la acción de bancos oficiales.
La novedad de ayer, ante el mejor tono del mercado de acciones y bonos, fue algo de entrada de dólares financieros: es decir, oferta de divisas por parte de privados del exterior.
«La demanda se sigue explicando por las compras de billetes de personas físicas y jurídicas, los pagos de tarjeta de crédito por los gastos en el exterior y los pagos de obligaciones de empresas para el pago de importaciones. Y por el lado de la oferta hubieron unos u$s 100 millones liquidados de la exportación y algunos ingresos de inversores del exterior», escribió ABC Mercado de Cambios en un informe para sus clientes
La aparición de algo más de oferta genuina, no sólo de inversores sino también de exportadores, alivió el trabajo del Banco Nación. En las últimas semanas el BCRA dejó de comprar los dólares que el Tesoro consigue a través de emisiones de deuda. En cambio, el ministerio de Finanzas que conduce Luis Caputo cambia sus divisas por los pesos que necesita para cubrir las cuentas del fisco directamente en el mercado, a través del Banco Nación.
«El mercado de dólar mayorista spot abrió al igual que las últimas ruedas muy demandado, pero a las ventas del Banco Nación se le sumaron liquidaciones de exportadores más elevadas, en torno a u$s 150 millones, y algunas ventas de flujos financieros, que permitieron a los oficiales desprenderse de solo u$s 150 millones», consignó Global Agro Brokers.
El dólar mayorista avanza 0,11% en lo poco que va de junio, 34% en lo que va del año y 56% en los últimos 12 meses.
Bonos y acciones, mejor
El acuerdo con el FMI podrá tener costos políticos para la administración de Mauricio Macri, pero no genera más que seguridades entre los participantes del mercado financiero.
Ayer, la cifra final que alcanzaría la línea de asistencia del Fondo era lo que más interesaba a los operadores. La cifra original que trascendió, de unos u$s 30.000 millones, queda chica frente a las nuevas expectativas. Eso y la confirmación de que el Gobierno busca acuerdos con otros organismos multilaterales para sumar préstamos de asistencia genera confianza en la capacidad de pago de la deuda y apuestas por acciones que, a ojos de algunos, aparecen como sobrecastigadas.
El Merval trepó 4,5% y volvió a ubicarse por encima de los 30.000 puntos, en base a expectativas respecto al acuerdo con el Fondo y previsiones optimistas sobre la posible incorporación del mercado local al índice de emergentes de MSCI. El indicador porteño volvió así a terreno positivo, con un avance de apenas 1,28% en el año.
Los papeles que más subieron fueron Banco Francés con 12%; Distribuidora de Gas Cuyana 9,3%; y Supervielle 8,4%. También las acciones de empresas argentinas que cotizan en Wall Street subieron hasta 11%, mientras que los bonos soberanos promediaron avances del 1,5% y el riesgo país cayó 1,66% a 475 puntos.