Son los cálculos para los envíos registrados entre este mes y julio próximo. Implica que el Fisco recaudará unos u$s 390 millones en concepto de retenciones
La apuesta oficial a que el sector agropecuario vuelva a traccionar este año la alicaída economía y, en ese marco, ayude a mejorar los números fiscales en la búsqueda del déficit fiscal cero, aparece cada vez más palpable.
Aunque varias veces el propio sector productor reclamó a autoridades, analistas y periodistas no contar los dólares antes de la cosecha, el cálculo de los ingresos de divisas, y también de las retenciones, que generará la campaña agraria 2018/19 estuvieron a la orden del día. Sobre todo, a partir de la volatilidad cambiaria de los últimos días, que hizo temer una nueva corrida que dispare al dólar en la previa a la pelea electoral. Así, el propio Gobierno se encargó de difundir el fin de semana que espera que la agroindustria genere unos u$s 25.000 millones.
Y a horas de que el presidente Mauricio Macri visite la 13° edición de Expoagro, el Gobierno puede tener certeza de que el camino al menos hasta las elecciones primarias (las PASO de agosto) contará con un ingreso más que interesante de divisas generadas por la agroexportación. Se trata de por lo menos u$s 2500 millones, de los cuales cerca de u$s 390 millones entrarán al Fisco en concepto de retenciones.
Así se desprende de cálculos sobre la base del registro oficial de Declaraciones Juradas para granos y oleaginosas de la campaña agricola 2018/19, que elabora la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios. Puntualmente, del período de embarque declarado por las cereales entre este mes y julio próximo para los cuatro principales cultivos y sus subproductos. Son datos al lunes 11.
Allí surge que las ventas externas de maíz superarán las 9,2 millones de toneladas entre marzo y julio. Al FOB oficial de ayer, ese volumen está valuado en u$s 1477 millones. Con las nuevas retenciones, representan unos u$s 148 millones que ingresarán a las arcas fiscales en ese período.
Las exportaciones de maíz, del que se espera una cosecha en torno a 46 millones de toneladas, se concentran con fuerza entre este mes (más de cuatro millones de toneladas) y abril (con 2,7 millones de toneladas a embarcar). Vietnam aparece como el destino principal para el cereal local, seguido por Malasia.
En tanto, desde abril se suman las ventas externas del complejo sojero. Según las DJVE hay embarques entre abril y mayo por 624.000 toneladas de soja sin procesar. Al FOB oficial de ayer, eso representa casi u$s 205 millones, y unos u$s 57 millones en concepto de retenciones. Es que el complejo oleaginoso tiene un derecho de exportación fijo de 18% más los $ 4 por dólar embarcado.
Entre abril y julio, en tanto, se concentran exportaciones de aceite de soja por 382.000 toneladas, equivalentes a u$s 246 millones, que dejarían unos u$s 69 millones por retenciones. En tanto para harina de soja, en esos mismos cuatro meses, hay registros de embarques por 910.000 toneladas, valuadas a precio FOB oficial de ayer en poco más de u$s 285 millones, que dejarían retenciones por unos u$s 80 millones.
En el complejo sojero se advierte una disminución de los registros de ventas al exterior de los subproductos de la oleaginosa (principalmente de harina) en relación con los negocios concretados para el mismo lapso del año pasado, que estuvo dominado por la sequía.
La explicación puede encontrarse en las distorsiones que afectaron al mercado en medio de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, así como en la falta de incentivo para procesar el poroto que, dicen en las industrias aceiteras, dejó la eliminación del diferencial de retenciones que existía hasta agosto pasado (los subproductos tributaban tres puntos porcentuales menos que la soja sin procesar). El sector de los productores rechaza esa argumentación.
De acuerdo con el line-up para las próximas dos semanas, el grueso de los embarques de harina de soja serán destinados a Vietnam; Argelia e Indonesia.
A los dólares del maíz y de la soja, se suman los que aportará el trigo en los próximos cuatro meses. Si bien el cereal que batió récord de producción (19,5 millones de toneladas) concentra sus exportaciones entre diciembre y abril, el registro de DJVE contempla ventas al menos hasta junio próximo.
Así entre abril y junio, se embarcarán otras 1,2 millón de toneladas de trigo, valuadas en u$s 284,4 millones, que dejarán unos u$s 28,5 millones al Fisco por retenciones.
A los tres grandes cultivos argentinos, se suman ventas al exterior de girasol por algo más de 21.000 toneladas y u$s 7 millones; y de aceite de girasol por algo más de 83.000 toneladas, valuadas en u$s 54,2 millones.