El año pasado hubo en realidad un superávit «de caja» de u$s8.492 millones, menos que lo informado por el INDEC. Fuerte superávit de casi u$s1.000 millones en diciembre.
El año pasado los exportadores dejaron pendientes por liquidar unos u$s4.500 millones, según se desprende de la comparación de los datos del Balance Cambiario del Banco Central de diciembre y los datos del Intercambio Comercial Argentina (ICA) del INDEC. Se trata de operaciones que fueron declaradas y concretadas, pero cuyo producido en divisas no fue todavía liquidado en el Mercado Unico y Libre de Cambios (MULC).
Se puede definir como el flujo diario de dólares. De acuerdo con la información del BCRA, el intercambio comercial argentino dejó un saldo real a favor del país de u$s8.492 millones, unos u$s4.036 millones menos de lo marcó el ICA (u$s12.528 millones).
En el fondo, ese flujo es lo que realmente importa, porque en una coyuntura de escasez de divisas y falta de crédito, el andamiaje de la economía depende de la disponibilidad de divisas que hay al momento.
La diferencia con el INDEC se debe a que el organismo estadístico computa operaciones informadas a la Aduana, es decir, el “devengado”, mientras que el BCRA toma en cuenta la compra y venta de dólares en el MULC, es decir “la caja”.
Las diferencias entre una y otra planilla son normales, ya que se vinculan con los tiempos del comercio exterior. Una empresa que informa una operación a la Aduana no la cobra al contado sino que le concede a su cliente algunos días.
Según el INDEC, en 2020 se concretaron exportaciones por u$s54.884 millones, pero en rigor se cobraron u$s50.354 millones. La diferencia de u$s4.527 millones se considera un crédito comercial concedido por las empresas argentinas a sus clientes del exterior.
Por otro lado, para el organismo estadístico se pactaron importaciones por u$s41.865 millones. Para ello, el BCRA vendió dólares para pagar compras en el exterior por u$s42.356 millones. Hubo u$s491 millones de diferencia que corresponden a compras anticipadas de importadores.
Al respecto, el Balance Cambiario del BCRA reveló que en diciembre los exportadores apuraron el cobro de operaciones que tenían pendientes y eso fue lo que mejoró el saldo respecto de los dos meses anteriores. En octubre y noviembre lo pendiente de cobro alcanzaba a poco más de u$s5.000 millones. Para la entidad monetaria, en el último mes del año pasado ingresaron dólares de exportaciones por 4.654 millones y salieron u$s3.727 millones por compras. Eso dejó un superávit de u$s927 millones. Lo interesante es que para el INDEC ese mes hubo un déficit de u$s364 millones, como producto de declaraciones de exportaciones por u$s 3.544 millones y de importaciones por u$s3.908 millones. Fue el primer déficit anunciado por el organismo estadístico en 16 meses.
En el Gobierno ahora estarán atentos a la posibilidad de apurar el cobro de parte de las exportaciones pendientes, a lo cual se sumarán las divisas de la cosecha que se esperan para finales de febrero y principio de marzo
Desde el 29 de mayo del año pasado el Banco Central mantiene un firme control sobre el flujo de dólares que entran y salen del país. En el caso de las importaciones procura evitar las compras anticipadas, y eso se refleja en las planillas. El monto de las importaciones anuales declaradas por el INDEC son casi iguales a las del BCRA, aunque en los últimos dos meses de 2020 ese punto comenzó a relajarse. En noviembre, las importaciones “anticipadas” alcanzaron a u$s361 millones y en diciembre llegaron casi a u$s500 millones.
Frente a ello, el Banco Central reforzó la vigilancia. La entidad anunció penalidades para 9 empresas importadoras que adquirieron los dólares a la cotización oficial, pero que no verificaron el ingreso al país de las mercaderías correspondientes.