Arranca oficialmente una semana corta que puede ser movida. El índice que mide el JP Morgan que deberá seguirse con atención
La preocupación por el riesgo país volvió a pesar del feriado local. Pasada la euforia, los bonos de la deuda argentina recibieron el impacto del corte masivo de luz y de los resultados electorales.
Esto hizo que el riesgo subiera a 855 puntos básicos. En otras palabras, los bonos de la deuda tuvieron una fuerte baja, al tiempo que aumentaba el valor de los bonos de Estados Unidos que son la referencia de este indicador.
Pero no fueron solo los bonos argentinos los que estuvieron en el offer de las pantallas. Los títulos de países emergentes, están padeciendo la suba de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, donde los inversores se muestran contradictorios. Por un lado, se cubren con bonos y, por el otro, apuestan a Wall Street. La cautela y el riesgo conviven en el mercado norteamericano, al punto que hay preguntas si no se está armando una burbuja sobre Wall Street.
Lo cierto es que el dólar preanuncia que vuelve con fuerza. Él lunes subió 0,15% contra el real, 0,17% sobre el peso mejicano y 0,20% si se lo compara con el peso chileno. En Asia todas las monedas cayeron frente al billete de Estados Unidos y el DXY que mide al dólar contra las seis principales divisas del planeta, subió 0,08 por ciento. El euro fue el único que resistió y por eso el indicador moderó su alza.
Brasil no la está pasando bien y no es una buena noticia para la Argentina. La Bolsa de San Pablo perdió 0,43% en un día donde subieron casi todos los mercados bursátiles del mundo.
Ahora todos miran las decisiones que tomarán esta semana los principales bancos centrales. Se espera que haya una reducción de tasas por parte del Reino Unido, que Japón haga una revisión de su política monetaria y que la Reserva Federal mantenga sus tasas sin cambios. Solo 18% de los inversores cree que habrá una suba de tasas en Estados Unidos. En cambio, para la reunión de fin de julio, más de 80% de los jugadores cree que habrá un recorte de las tasas norteamericanas.
Cabe aclarar, que el movimiento de bajas de tasas empezó hace más de un mes en el mundo.
No hay que seguir a la Argentina porque está afuera de la normalidad global. El país tuvo tasas de más de 70% anual y ahora recién están por debajo de 65%, cifras que contrastan con los planes de los demás países que buscan reactivar sus economías con tasas menores a la inflación para que aumente la actividad económica.
El precio del dólar puede seguir subiendo. El mayorista, cabe recordar que terminó la semana pasada en $44,03 y el que se vende al público en 45,17 pesos, según el promedio del Banco Central. En aquel momento, se pensó que fue una normalización tras la euforia que vino de la mano del «Efecto Pichetto», pero ahora esa euforia terminó y habrá que ver como recibe el mercado las adversas novedades del fin de semana.
La buena noticia, y que puede ser un buen augurio para la Bolsa de Buenos Aires, es que los ADR’s argentinos –certificados de tenencia de acciones– siguieron en alza en Wall Street. Hasta Pampa Energía, cuestionada por el apagón, aumentó 0,84 por ciento. Lo mejor fue IRSA Propiedades Comerciales que subió 4,53% y Corporación América con 3,11 por ciento.
Es una semana corta, pero las novedades pueden ser grandes y habrá que seguir la tendencia del riesgo país que es lo más preocupante.