Tres bancos internacionales emitieron informes sobre la Argentina con foco en los dos grandes ejes que dominan este escenario post-cimbronazo cambiario: el inminente acuerdo con el FMI y la posibilidad de abandonar la categoría de fronterizos y recuperar la clasificación de emergentes
Tres bancos internacionales emitieron informes sobre la Argentina con foco en los dos grandes ejes que dominan este escenario post-cimbronazo cambiario: el inminente acuerdo con el FMI y la posibilidad de abandonar la categoría de fronterizos y recuperar la clasificación de emergentes
Morgan Stanley otorga 70% de probabilidad al ascenso a emergente
En un informe elaborado por Morgan Stanley señalan que su expectativa es que MSCI anuncie la decisión de incluir a Argentina al grupo de mercados emergentes el próximo 20 de junio a la vez que esperan que el FMI anuncie un acuerdo potencial del orden de u$s 30.000 millones entre mediados y fines del mes de junio.
«Ambos los eventos deberían ser catalizadores importantes para los precios locales de los activos y vemos oportunidades de inversión que ofrecen buenos rendimientos acorde al riesgo asumido para las acciones locales de cara a junio y el tercer trimestre», señalan en su informe los analistas del banco de inversión.
Además, desde el banco sostienen que «la baja volatilidad de la moneda no es un requisito formal para obtener el estado mercado emergente. Sin embargo, la reciente fuerte devaluación del peso ha afectado al mercado el sentimiento hacia el resultado potencial».
En el caso en que Argentina ingrese a mercado emergente, Morgan Stanley estima un ingreso neto de u$s 3.000 millones antes de su efectiva implementación en mayo de 2019 y un potencial de suba de 20% para las acciones en los cuatro meses siguientes a la noticia.
Para los analistas, hay dos posibles resultados de cara al anuncio de MSCI. El primer escenario es que MSCI decida incluir a Argentina como mercado emergente, a lo que atribuyen una probabilidad del 67%. Es un estatus que el país perdió en 2009, cuando pasó a ser catalogado como fronterizo.
«El progreso estructural liderado por la administración Mauricio Macri entre 2016 y 2018 debería ser visto por MSCI como suficiente para demostrar el compromiso con la macro normalización y las reformas de Argentina», señala el informe de Morgan Stanley.
El segundo escenario es que MSCI decida ampliar el período de consulta de mercado emergente de Argentina y extenderlo a junio de 2019, un evento al que el banco de inversión le asigna un 33% de probabilidad.
«En este caso, MSCI necesitaría contar con mayor evidencia sobre el compromiso del gobierno en la implementación de las reformas estructurales y habrá que tener en cuenta que Argentina tendrá elecciones presidenciales en octubre de 2019», explican.
En otras palabras, dado que las elecciones se darían a posteriori de la fecha de decisión de MSCI que típicamente son a mitad de año, los analistas de Morgan Stanley postergarían recién para mediados de 2020 un potencial ingreso a emergente si es que Argentina no lo logra en esta oportunidad.
Deutsche aclara que acuerdo con FMI no permite prescindir del mercado
En un momento en que el mercado se encuentra expectante a los detalles del préstamo con el FMI, Deutsche Bank difundió un informe con sus estimaciones respecto del tamaño del acuerdo y de algunas de las exigencias del organismo. Los analistas señalan que «Argentina podría acceder a un máximo de u$s 6.600 millones por año hasta un límite de u$s 20.000 millones, es decir, el 435% de la cuota del país. Este préstamo sería el segundo más grande después de Grecia en términos nominales y estaría entre los diez primeros como cuota de la cuota del país en los mercados emergentes. El crédito anual de Argentina de u$s 6.600 millones con el FMI está muy por debajo de los u$s 9.000 millones conseguidos con la emisión de bonos colocados este año y cubriría solo una quinta parte de los u$s 30.000 millones en necesidades netas de financiación estimadas para 2019». De ahí que el banco aclara que lo del FMI funciona como ancla política pero no como sustituto de los mercados. También especifica que en ocasiones excepcionales es posible acceder a fondos por encima de los límites normales, pero se trata de programas para países de alto riesgo con ratios de necesidades de financiamiento y deuda pública del 15% del PBI y 70% del PBI. Las métricas de Argentina, apunta el banco, eran de 14% y 57% en 2017.
Desde el FMI han insistido en una reducción de déficit fiscal de cara a los próximos años. «Sin embargo, el ajuste monetario, los riesgos de recesión y el escaso apetito por las reformas legislativas requiere una consolidación gradual, más en línea con los objetivos de déficit primario revisados del gobierno» señalan en el informe los analistas de Deutsche Bank.
Los especialistas esperan una mayor independencia del BCRA, atacando la inflación y siendo restrictivo en su política monetaria con tasas de interés reales hasta que las expectativas de inflación vuelvan a su trayectoria descendente. Incluso si esto afecta las perspectivas de crecimiento.
En cuanto al financiamiento, desde Deutsche Bank destacan que «es probable que el Tesoro aumente la cantidad de emisiones en el mercado local buscando reducir la vulnerabilidad de la cartera de deuda soberana».
Credit Suisse nota que el Gobierno confía demasiado en ‘efecto FMI’
Tras haber visitado el país y haberse reunido con altos funcionarios locales, el banco de inversión Credit Suisse indicó en un reporte que ven con buenos ojos el hecho de una mejor coordinación entre el gobierno y BCRA, aunque subrayó que «un programa del FMI debería promover aún más la coordinación dentro el Gobierno».
«Las expectativas son altas en relación a un trato con el FMI aunque nos decepcionó un poco que se confíe en un acuerdo para restablecer la confianza. Notamos que las expectativas del gobierno parecen ser que los mercados se calmarán e incluso se recuperarán una vez que se anuncie el préstamo», destacan los analistas.
Credit Suisse también señala que «el BCRA cree que el peso se ha depreciado demasiado y por eso es que se compromete a defender los 25 pesos como nivel clave. En lo que respecta a las tasas de interés, se mantendrán elevadas durante algún tiempo para garantizar el mercado estabilidad y contener el paso de la devaluación a la inflación».
En lo que respecta al balance económico, el informe resalta que «el resto de 2018 será difícil en términos de rendimiento económico con bajo crecimiento (1,5%) y una alta inflación (alrededor del 25%). Sin embargo, las condiciones deberían mejorar de cara a 2019».
La política seguirá siendo un terreno volátil. «El gobierno parece estar en una posición más débil ahora con poco poder de negociación para hacer alianzas. Aun así, de acuerdo a los analistas políticos, Macri sigue siendo un sólido candidato para las elecciones presidenciales de 2019».