Lo admitió el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, quien recibió un proyecto de la Cámara de la Construcción, que consideró un sector clave para la «post-pandemia». A su vez, negó que el proyecto de moratoria que se enviará al Congreso sea para beneficiar al empresario Cristóbal López.
El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, admitió en una entrevista radial que el gobierno tiene bajo estudio una propuesta de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) para estimular la inversión privada en construcción como parte de un programa de reactivación de la economía.
Entrevistado en programa “Sábado Tempranísimo”, por radio Mitre, Kulfas admitió que la propuesta es factible. “Es una propuesta que han hecho y va a ser analizada. El sector viene de tres años de mal desempeño, con reducción de los niveles de empleo y actividad desde 2018 y con una pandemia que paralizó muchos proyectos. Es un sector importante para el crecimiento post-pandemia”, señaló el funcionario, que luego reafirmó que “sí”, que el proyecto está bajo estudio.
Como adelantó Infobae, la Camarco le adelantó al presidente Alberto Fernández sus ideas al respecto y luego presentó un documento al propio Kulfas, El plan de la Cámara incluye tres etapas, a instrumentarse entre el tercer trimestre de este año y el 2021 para “sostener la producción, reactivar y crecer” y precisa que en el último año el sector perdió 150.000 empleos directos, equivalente a una caída del 40%. El argumento de “venta” de la propuesta es que “la construcción privada es el 70 % de la actividad del sector construcción y requiere poco aporte estatal, pero requiere incentivos para recomponer la atracción al inversor”.
En una primera etapa la propuesta incluye la activación de préstamos de emergencia y del régimen de exenciones impositivas incluido en el propuesto 2019 (el último de la gestión macrista) y luego la creación de un “vehículo de inversión” y el impulso al crédito hipotecario.
Y en una tercera etapa, hacia el final de 2020 y el inicio de 2021, la Camarco propuso un procedimiento de “exteriorización” de activos para invertir en obras nuevas y en construcción. Básicamente, se trataría de un “blanqueo para desarrolladores inmobiliarios”, presentado bajo el ropaje de un “combate contra la economía informal”, muy habitual en el sector. En esa etapa, dicen en la Cámara, también sería necesaria una “Ley de Vivienda” que incentive la inversión en viviendas para venta, alquiler o leasing para sectores medios y que difiera el pago del Impuesto a las Ganancias sobre el aporte del terreno.
En la entrevista radial, Kulfas también señaló que, además de pagar en todo el país -como adelantó el presidente Alberto Fernández- la tercera cuota del “Ingreso Familiar de Emergencia”, el gobierno piensa mantener el programa ATP (que incluye el pago de “salario complementario” a empleados del sector privado, aunque no fue muy preciso respecto de su alcance, ya que enfatizó que hay muchas partes del país que ya salieron de la etapa de “Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio” (ASPO) y están en la de “Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio” (DISPO), en las que -dijo- ya hubo recuperación a partir de mayo.
“En principio (el ATP) se mantiene mientras dure el aislamiento. Hay partes del país que están abiertas y trabajando, pero a un nivel muy bajo. Mientras esto ocurra, seguiremos con la ayuda”, dijo Kulfas, quien mencionó sectores como turismo y hotelería, que serán los que saldrá más tarde del “aislamiento” y en los que el gobierno mantendrá la ayuda durante un período más largo, Kulfas se limitó a señalar que en la última cuota el ATP se pagó en todos lados, pero la demanda fue más fuerte en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA, que incluye la Capital Federal y 40 Municipios del conurbano bonaerense), Chaco y Río Negro.
Sobre el proyecto de moratorio en que trabaja la AFIP y que será enviado al Congreso, Kulfas dijo que “no tiene nombre y apellido”, negando que fuera hecho para beneficiar al empresario del juego Cristóbal López, que fue demandado por la agencia impositiva.
“Es para reestructurar deuda de todas las empresas. No tiene nombre y apellido. Son problemas que se gestaron con la crisis desde 2018 y se agravaron con la pandemia. Miles y miles de empresas tienen balances en rojo. Hay que regularizar situaciones impositivass y previsionales; así como la Argentina quiere regularizar la deuda con los acreedores. Nadie está pensando en una empresa, sino en el conjunto. No es mirada que tenga que ver con una persona u otra”, negó Kulfas.