Datos parciales de junio muestran que crece la emisión destinada a financiar al sector público porque el Tesoro empezó a hacer retiros de las utilidades que obtuvo el BCRA en 2014. La aceleración de la emisión está lejos de afectar a precios, al menos hasta el momento, pero si se ve un repunte en las cotizaciones paralelas del dólar. El blue gana 2,5% en lo que va del mes y el contado con liquidación 5,6%
El Banco Central (BCRA) parece más convencido que nunca de que la emisión monetaria no influye sobre el nivel de precios. Mientras las mediciones de inflación se desaceleran, la entidad que conduce Alejandro Vanoli eleva gradualmente la tasa de expansión monetaria, que ya llega al 33% interanual. En los primeros días de junio la toma de utilidades de la entidad por parte del Tesoro hizo crecer la emisión monetaria para asistir al fisco y explicó la aceleración. Donde si se ve una reacción a este aumento de los pesos en la calle es en los tipos de cambio paralelos.
Sólo en los primeros doce días de junio el financiamiento al sector público generó una expansión monetaria de $ 14.885 millones. Esto es más de lo que transfirió el BCRA al Tesoro en todo el mismo mes del año pasado y, prácticamente el doble de los $ 7557 millones que le pasó en mayo de este año.
Fuentes del BCRA aseguraron a este diario que las transferencias responden a retiros graduales de utilidades 2014 que hace el Tesoro desde su cuenta en la entidad.
El crecimiento del circulante al 12 de junio salta al 37% interanual, pero la cifra está exagerada por un retroceso puntual de la base monetaria justo un año antes. Si se comparan en cambio los promedios mensuales de saldos diarios -menos sujetos a la volatilidad diaria-, la expansión monetaria es del 33% anual.
La paz cambiaria que obtuvo el Gobierno en octubre pasado y que en los últimos días se empezó a poner tímidamente en duda en el mercado cambiario paralelo y en la cotización de la divisa implícita en activos (el contado con liquidación) tuvo a esa variable a favor.
Diciembre terminó con un crecimiento de la base monetaria del 22% interanual que supuso en realidad una contracción en términos reales si se la compara con índices de inflación privados que rozaban el 39% interanual.
Ahora esa relación entre crecimiento del circulante y precios se invirtió: mientras que la base crece al 33% interanual los precios desaceleran al 23,5% interanual según la medición de Elypsis.
Buena parte de la aceleración de la expansión monetaria de junio se da porque el BCRA ha abandonado el objetivo de esterilizar tantos pesos como sean posibles en sus licitaciones semanales de letras y notas.
Hasta el 12 de junio, la autoridad monetaria había sacado de la calle $ 24.043 millones colocando Lebac a bancos a cambio de sus depósitos ociosos.
Es un esfuerzo modesto de la «aspiradora» de Vanoli en comparación con los $ 56.981 millones que retiró la entidad en los primeros seis meses del año pasado, cuando Juan Carlos Fábrega comandaba la entidad y trataba de calmar al mercado después de la brusca devaluación de enero.
Los datos parciales que dio a conocer el BCRA el viernes muestran a junio como el mes más expansivo en lo que va del año, con un aumento de la base de $ 39.346 millones. Es cierto que, sin embargo, habrá que esperar el cierre del período para conocer qué tan expansivo será ya que la cancelación de más de $ 17.000 millones en pases pasivos (un instrumento parecido a las Lebac, pero de más corto plazo) explica una porción muy importante de ese aumento. Los pases son muy volátiles y ese componente podría revertirse.
Por lo pronto sabemos que el BCRA se limitó a aspirar sólo $ 3.000 millones ?frente a ofertas por $ 7.000 millones más? vía Lebac en la semana del 15 de junio para dejar liquidez suficiente para la emisión un Bono del Tesoro Nacional (Bonac) por al menos $ 3.000 millones que saldrá el mercado hoy.
Mientras tanto, el sistema nada en pesos y los tipos de cambio paralelo reaccionan. El blue gana 2,51% a $ 13,02 en el mes después de caer todo el año y el contado con liquidación 5,61% a $ 12,33.