«Hasta impactante», definieron en Producción a los resultados. En junio, mejoró 17% la construcción y la actividad fabril, el 6,6%. Textil, en deuda
En plena carrera electoral, a dos semanas de las primarias obligatorias, el Gobierno tiene más datos para sostener su argumento de que los brotes verdes se expanden por la economía y para entusiasmarse con un cierre de año en positivo.
El Indec difundió ayer los datos de junio del Estimador Mensual Industrial (EMI), que arrojaron un alza interanual de 6,6%, lo que representa el segundo mes consecutivo de mejora (en mayo había subido 2,7%) y la primera vez que la actividad fabril quedó por encima del nivel que tenía en diciembre de 2015. Por su parte, la actividad de la construcción saltó 17% interanual en el sexto mes del año. Se trata del mayor porcentaje que el ISAC arrojó desde diciembre de 2010. En lo que va del año, acumula cuatro meses consecutivos al alza, y cerró el semestre con suba de 7,1%.
De acuerdo con los datos informados por el organismo Jorge Todesca, el segundo repunte consecutivo de la industria permitió que la actividad recuperara todo lo que había perdido en el primer cuatrimestre (con la caída de 6% registrada en febrero), y lograra cerrar la primera mitad del año sin variaciones contra igual período de 2016.
El secretario de Industria, Martín Etchegoyen, manifestó a El Cronista que el alza interanual del EMI es «hasta impactante» y remarcó la confianza oficial en que la tendencia se consolide en los próximos meses de la mano de las políticas macro y del paquete de medidas que se fueron poniendo ne marcha para la actividad (ley pymes, autopartes, convenios de productividad, entre otros).
En el repunte interanual de la actividad, hubo rubros con fuerte incremento, explicados en gran parte por los malos resultados que cada rubro había tenido el año pasado en medio de la recesión de la economía.
Así en junio, se expandió 18% el sector de productos minerales no metálicos; la industria automotriz con la recuperación de Brasil, más demanda de otros mercados y buena performance en el mercado doméstico subió 15,9%; metalmecánica e industria del tabaco (15,4% cada una); productos de caucho y plástico (9,5%), la edición e impresión (8,9%), la industria química (5,4%); papel y cartón (3,5%); la industria alimenticia (3,2%); las industrias metálicas básicas (0,7%) y la refinación del petróleo (0,3%).
El único segmento industrial que cerró junio en negativo fue el textil, que arrojó una retracción de 4% interanual.
«De los 12 rubros que mide el EMI, 11 dieron positivo, sólo textiles no logra traccionar, pero confiamos en que con la mejora que comenzó a evidenciar el consumo, fuerte en bienes durables autos, motos, línea blanca y las medidas adoptadas (como Ahora 3 y 6 para indumentaria nacional), la mejora para la industria textil empiece a verse entre julio y agosto», comentó Etchegoyen. Por su parte, en el desagregado del EMI por subgrupos se evidencian caídas específicas, como el 41% de retroceso en fibras sintéticas y artificiales. Si bien está ligada a la actividad textil, en la medición del Indec se la computa dentro de la producción de Químicos.
También la molienda de cereales y oleaginosas bajó 7,4% interanual por menores exportaciones de aceites de soja en junio, a raíz de una mayor retención por parte de los productores debido a los menores precios internacionales. Incidieron en la retracción los problemas logísticos como consecuencia de las inundaciones, que demoraron tanto la cosecha como el traslado a las plantas procesadoras. Este subrubro, por el peso que tiene sobre el indicador de la industria alimenticia fue determinante para que esa actividad subiera 3,2%.
En tanto, el Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (Isac) saltó 17% en junio y acumuló una mejora de 7,1% interanual en el primer semestre. Contra los últimos seis meses de 2016, subió 6,4% entre enero y junio pasados.
En construcción, además, el Indec reveló que mayo tuvo el mayor nivel de empleados registrados de la era Macri: 430.835, 8,1% más que en mayo de 2016.