El balance cambiario arroja un ingreso de divisas de u$s 152 millones en el segundo trimestre. Tras un año de la prohibición de atesorar dólares, es el cuarto trimestre consecutivo en el que hay un saldo levemente positivo. Pero no alcanza para sostener las reservas
Durante el segundo trimestre del año el balance cambiario arrojó un superávit de u$s 152 millones. Un resultado modesto si no se lo compara con la fuga de casi u$s 2.000 millones de mismo período del año pasado, antes de que el cierre total del cepo eliminara la posibilidad de comprar dólares para atesorara. El balance arroja números positivos por cuarto trimestre consecutivo pero, aún así, no logra traducir el fin de la fuga en ingresos significativos de divisas: las reservas cayeron u$s 9.970 millones en esos cuatro trimestres.
El Banco Central publicó ayer su informe trimestral sobre la Evolución del Mercado Único y Libre de Cambios y Balance Cambiario correspondiente al segundo cuarto de este año. Allí se compendian los resultados del primer año de la prohibición de atesorar dólares.
Si bien las “medidas de administración cambiaria” empezaron con trabas de la AFIP impuestas a fines de octubre de 2011, el 5 de julio de 2012, mediante la Comunicación A 5318 el Banco Central reguló la salida de fondos de forma tal que su destino sea el pago de bienes o servicios y no el atesoramiento. Recién en ese momento, la entidad conducida por Mercedes Marcó del Pont logró ponerle fin a la fuga de divisas.
En los dos primeros trimestres de 2012, la fuga de divisas había rozado los u$s 3.600 millones. En la segunda mitad de ese año, en lugar de fuga se dio un saldo positivo de u$s 169 millones.
Tras un año sin fuga de divisas, el saldo positivo del balance cambiario suma u$s 431 millones. El número, modesto, tiene en el aumento de las importaciones (en especial las energéticas) su principal explicación.
Por ejemplo, en el segundo trimestre de 2013, los ingresos por exportaciones totalizaron u$s 22.296 millones, un descenso de 1% respecto a los ingresos de mismo periodo del año pasado. Los pagos de importaciones de bienes, en cambio, alcanzaron su segundo máximo histórico, con u$s 18.248 millones: un aumento interanual de 17%.
Como resultado de este mayor uso de los dólares del saldo comercial, como consigna el informe, las reservas de la autoridad monetaria perdieron casi u$s 5.300 millones en el primer trimestre del año y cerca de u$s 10.000 millones en los dos últimos semestres.
Otro rubro que restó divisas fue el de turismo, uno de los pocos consumos subsidiados por el esquema de desdoblamiento cambiario de facto en el que ha devenido el cepo. Los turistas pagan un dólar 20% mayor al oficial, mientras que los inversores pagan un 62% por encima de ese nivel para conseguir dólares a través de bonos y acciones.
Según publica el Central, los egresos netos por turismo y viajes alcanzaron unos u$s 2.200 millones en el segundo trimestre, unos u$s 1.300 millones más que en mismo período de 2012.
Por último, resalta el informe, “las operaciones de compra y venta de moneda extranjera en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) arrojaron un excedente de u$s 1.127 millones de dólares en el segundo trimestre”, una mejoría interanual de u$s 2.100 millones.