¿Hago un plazo fijo o compro dólares?», es la pregunta que se hace el ahorrista que tiene un mínimo de $ 10.000 para invertir.
Por un plazo fijo a 30 días los bancos pagan alrededor del 25% anual: conviene hacerlo a través de Internet, por Home Banking, que tienen mejores tasas que por ventanilla, ya que quieren incentivar a los clientes al uso de canales electrónicos, que tienen menor costo para las entidades que un cajero humano.
Los contratos de dólar futuro de Rofex marcan una divisa de $ 18,75 para fin de febrero del 2017, lo que marca una devaluación del 20%. Por lo tanto, hoy el plazo fijo estaría rindiendo más que el dólar.
Pero hay otras alternativas más redituables, como hacer una especie de ?plazo fijo? en la Bolsa. Se puede realizar en el banco donde uno tiene cuenta, a través del área de Inversiones, abriendo una cuenta comitente, o en una sociedad de bolsa, donde las comisiones suelen ser menores (ver que no cobren costo mensual de mantenimiento de cuenta).
El Bonac 2016 es un bono del Tesoro Nacional que vence el 12 de julio y tiene una TIR del 34% anual.
Los Bonac son los primeros bonos públicos que pagan una tasa de cupón variable que depende de las tasas de corte de las Lebac. De esta forma, un inversor minorista recibirá una tasa de cupón a la que sólo podría acceder invirtiendo montos más elevados en el segmento competitivo de la subasta de Letras del Banco Central. La ventaja es que los bonos del Tesoro han sido uno de los instrumentos más líquidos del mercado, mientras que las Lebac, a nivel minorista, muestran una menor liquidez. De este modo, un inversor puede acceder a una tasa de cupón en línea con las Lebac, pero con mayor grado de liquidez.
«En un escenario de tasas de interés de mercado crecientes, el Banco Central podría convalidar subas en las tasas de Lebac, lo que se reflejaría en el flujo de fondos de los bonos y, por lo tanto, en su precio. Además, paga cupón trimestral, lo que permite una mayor frecuencia de reinversión de los cupones de interés, potenciando el rendimiento total de la inversión», informa el Instituto Argentino de Mercado de Capitales.
Si el inversor necesita el dinero antes de julio, que vence el bono, tiene el mercado secundario para venderlo, al igual que todos los activos que cotizan en Bolsa. Al ser muy líquidos, se puede salir en cualquier momento. «No obstante, a los efectos de asegurarse la rentabilidad, esperar el vencimiento es lo que le da al inversor la certidumbre de cuánto va a cobrar exactamente. Caso contrario, vendiendo antes, la rentabilidad puede verse modificada levemente», advierten desde Invertir en Bolsa.
Rinde 13% anual en dólares
Es más: si el ahorrista quiere cubrirse, puede comprar un contrato de dólar futuro a fin de julio, que tiene una tasa del 20%. Por lo tanto, con el ?sintético? (como denominan en la jerga a hedgearse con la cobertura) se puede obtener un rendimiento del 14% anual en dólares, que puede bajar al 13% si se le resta el 1% de comisión.
La ventaja de invertir en estos bonos es financiar en forma directa al emisor, sin ningún intermediario de por medio, como sucede con los plazos fijos, donde se le presta al banco, para que luego éste le preste a otro individuo. Por eso las tasas son mejores. Y se puede invertir desde $ 10.000. El ahorrista no será atendido por un FA (financial advisor) senior, sino por un FA junior, pero ya estará jugando en las grandes ligas.