El Jefe de Gabinete, Juan Manzur, confirmó que el Gobierno anunciará medidas para paliar la salida de divisas vía compras al exterior.
La preocupación por la falta de dólares es el tema recurrente en encuentros entre funcionarios del gabinete económico. Es que las importaciones de mayo fueron las más altas de la historia. Si bien las exportaciones también crecen, al Banco Central le cuesta y mucho acumular reservas. Tal como anticipó Ámbito, el Gobierno confirmó que en los próximos días anunciará medidas para paliar la salida de divisas. Pondrán el foco en los productos que están bajo licencias automáticas. Reconocen que “falta coordinación” para abordar el tema.
La reunión de Martín Guzmán, Miguel Pesce y Daniel Scioli a última hora del martes configuró una foto que se repetirá en los próximos meses. Es que más allá de las cuestiones coyunturales o incluso estacionales, en el Gobierno reconocen que una de las causas de la acelerada salida de divisas tiene que ver con la falta de coordinación entre distintas carteras para abordar el tema.
Actualmente existen controles por parte de la AFIP, el Ministerio de Desarrollo Productivo, el Banco Central y aún así no se puede detener la sangría de divisas. Ayer, el Jefe de Gabinete confirmó el anticipo de Ámbito. “Se está trabajando bajo la indicación del presidente en determinadas acciones que se van a tomar y que se van a formalizar en los próximos días”, dijo Juan Manzur al salir del cónclave de ministros, que también contó con la presencia del presidente Alberto Fernández.
Sobre ese punto, preocupan especialmente los productos que están bajo licencias automáticas, que explican alrededor del 70% del total. Esas compras crecen a una velocidad sensiblemente mayor al resto. Por el salto en los precios de la energía, por las mayores cantidades de productos químicos y también por “especulación”. El diagnóstico oficial es que muchas firmas se “sobrestockean” para acceder al tipo de cambio oficial y resguardarse de una posible devaluación.
Dentro de este universo también se encuentran una serie de artículos que por no contar con producción local, ni siquiera pasan por la órbita de monitoreo del Ministerio de Desarrollo Productivo. Ante la consulta de Ámbito, funcionarios del gabinete económico reconocen que “no se descarta ninguna herramienta”. En ese sentido, señalan que hay una serie de posiciones que actualmente están por fuera del esquema y podrían quedar bajo las licencias no automáticas. Aunque todavía nada está cerrado y endurecer las restricciones no aparece como la medida más simpática para un Gobierno que busca generar confianza.
En lo que hace a las licencias no automáticas, la variación es menor y está explicada principalmente por el repunte de la actividad económica. Las autopartes suben a un ritmo acelerado pero se debe a los récords de producción en las terminales locales, lo otro que crece sensiblemente son los insumos que demanda la industria electrónica de Tierra del Fuego. Créase o no, ese fenómeno se debe en parte a la mayor demanda de televisores por el mundial de fútbol de Qatar, pero de todas maneras es estacional.
El Gobierno entiende que en condiciones normales con este nivel de actividad las importaciones no deberían superar los u$s6.500 millones. Se apuesta a que con mayor control y “sintonía fina”, regresen a ese nivel sin perjudicar la actividad productiva. “Vamos a priorizar el crecimiento”, dijo Manzur en Casa Rosada, aunque está claro que ese guarismo deberá coincidir en paralelo con la meta de acumulación de reservas comprometida con el Fondo Monetario Internacional, que para este año plantea un incremento de u$s5.800 millones en las tenencias netas.