Luego de la fuerte devaluación del 23% en enero el mes de febrero arrancó con la misma tendencia. Pero el 5 de ese mes el Banco Central jugó una carta muy pesada. A través de la Comunicación A 5536 puso límites a los bancos sobre la cantidad de moneda extranjera que pueden tener en diversos activos (billetes, bonos, dólar-linked y futuros) y los obligó a desprenderse de los excedentes. Como es de imaginar, el impacto de esta medida fue trascendental. No solo se eliminó la mayor fuente de demanda sino que a su vez generó una gran oferta ya que los bancos tuvieron que desprenderse de estos activos lo que afectó sensiblemente su precio a la baja. Es por esta razón que el dólar oficial, los futuros, los bonos y los dólar-linked sufrieron grandes pérdidas en el mes.
Este movimiento inesperado del Central junto con la suba de tasas logró traer una gran calma al mercado cambiario, aunque creemos que si no se corrigen desarreglos fiscales importantes, esta calma durará muy poco tiempo. Pero el Banco Central claramente ha cumplido su misión por el momento. Obviamente como siempre decimos “en economía no hay cena gratis”. El costo de esta medida es sentar las bases de una gran recesión, un deterioro del balance de los bancos y los primeros pasos hacia el déficit cuasifiscal (pérdida del Central). Si bien estamos muy lejos de este último, es claro que el gobierno se enamora de los colchones que encuentra y los usa hasta agotarlos con lo cual en unos cuantos meses esta situación podría empezar a darse. Ya vamos a tocar este tema en un próximo artículo, pero ahora no nos desviemos del tema que nos ocupa.
Por otro lado, en febrero se dio a conocer la inflación de enero con el nuevo índice, que arrojó un valor de 3,7%. El mercado interpretó esto como una señal de que hay una intención del gobierno de sincerar la economía lo que hizo explotar la cotización de los bonos atados al CER.
Vayamos ahora directamente a lo que implicó esta medida para nuestra cartera:
Cambios realizados en el mes
En el mes realizamos unos movimientos de manera de ajustar nuestra cartera a la nueva coyuntura.
Lo más importante fue la cancelación de 15 contratos de futuro en ROFEX. En el mes tuvieron una importante caída con respecto a los valores de enero y dado que prevemos que el dólar va a estar bastante quieto por unos cuantos meses cerramos la mitad de nuestra posición. Esto lo pudimos hacer a un precio promedio de 9,30 bastante inferior a los 9,80 que cotizaba a fines de enero.
Por su parte, el día después que se conoció la noticia de la inflación de enero los bonos con CER subieron hasta un 22%. No esperamos nuevas confirmaciones y vendimos los DICP sin vacilar. Si bien posteriormente a su venta subieron un 6% más creemos que a largo plazo esos bonos no van a subir mucho más.
Por último incorporamos a nuestra cartera un Cheque de Pago Diferido avalado por SOLIDUM SGR que compramos en el MERVAROS por el que obtuvimos una tasa del 35%. De esta manera redujimos la volatilidad de la cartera y le ponemos un piso importante al retorno ya que la tasa conseguida es muy interesante.
Exposición
En los siguientes gráficos se puede apreciar cómo quedó la cartera luego de los movimientos, con y sin cobertura de tipo de cambio.
Si uno compara la exposición que tenemos este mes con la de enero observará que estamos mucho menos dolarizados si bien seguimos posicionados en esa moneda (en enero la exposición al dólar era del 309% contra los 183% actuales). Esto es producto de que no vemos en el corto plazo que el dólar tenga grandes presiones al alza. Creemos más bien que va a estar quieto por unos meses.
Cambios en el próximo mes
En el mes de marzo, no vemos la necesidad de hacer grandes cambios a la cartera ya que consideramos que está bien balanceada para el escenario que se viene.
Si producto de la actividad operativa de la sociedad contamos con algunos fondos excedentes probablemente lo estemos volcando a la compra de acciones de YPF combinadas con el lanzamiento de un call bastante fuera del dinero. Esto lo tomamos de la recomendación de TSA Bursátil a través de Nicolás Molfino que podés leer en los “TIPS BURSATILES – YPF, resultados y perspectivas”
Performance
Para finalizar cerramos contándote el resultado del mes que fue una pérdida del 11,59% sobre el valor de inicio de nuestra cartera. Si bien el resultado fue malo, el mismo se produce luego de haber obtenido el mes anterior una ganancia 63,38%
Dicho resultado fue producto de una baja del 5,7% en los futuros de ROFEX. Al estar nuestra cartera apalancada este resultado se multiplicó y explicó una caída del 13,2%. Como podrá observarse hay que ser muy cuidadoso en el uso de derivados y entender lo que se está haciendo ya que el resultado se amplifica. En nuestro caso se multiplicó por 2,3 transformando una caída del 5,7% en una pérdida del 13,2%.
Por su parte el BONAR X cayó un 4%, las ON de EURO cayeron un 1,3% y las letras de Capital Federal dólar-linked cayeron 1% y 6% respectivamente.
Por su parte los únicos dos instrumentos que subieron fueron el lanzamiento cubierto de Galicia que creció un 5% y el DICP que al valor de venta creció un 31%
Nos volveremos a encontrar con este informe en abril para contarte qué hicimos y cómo nos fue en marzo ¡Hasta entonces!
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