El escenario de apetito por bonos corporativos de alto rendimiento americano también ha derramado beneficios para los bonos soberanos, sub-soberanos y corporativos de emergentes. En comparación con los bonos de alto rendimiento estadounidense, los bonos de alto rendimiento de los mercados emergentes ofrecieron un aumento del rendimiento mayor a 95 puntos básicos en lo que va de 2017.
El rendimiento extra tuvo una duración más baja (3,75 frente a 4,04) y una calidad de crédito promedio más alta. Aproximadamente el 60% del índice de alto rendimiento de los mercados emergentes tiene una calificación de BB o superior, frente a menos del 50% de su contraparte de los Estados Unidos.
La deuda corporativa de los mercados emergentes ofrece mejores rendimientos ajustados al riesgo y para los inversores de renta fija que buscan rendimientos más altos, la deuda corporativa de los mercados emergentes ofrece oportunidades de rendimiento más atractivas, menor duration y un perfil de mejor calidad comparado con la deuda especulativa estadounidense.
La búsqueda de los inversores por el rendimiento en medio de tasas deprimidas en las naciones industrializadas ha impulsado el apetito por activos más riesgosos este año, mientras que el crecimiento más rápido en países en desarrollo y escenarios políticos estables también han prestado apoyo.
En paralelo, la debilidad del dólar en lo que va de 2017, que acumula una caída del 14% desde enero a la fecha, ha generado un mayor atractivo para los inversores a nivel mundial para posicionarse en bonos emergentes en moneda local, dado que, en términos generales, las monedas de emergentes se han venido apreciando contra el billete verde.
El ETF de bonos emergentes en moneda local (LEMB) registra un avance de 15% desde los mínimos de noviembre pasado y un 25% desde comienzo de 2016. Este buen pasar de los bonos emergentes en moneda local y la debilidad del dólar a nivel internacional ha generado un cambio de expectativas entre los grandes participantes del mercado.
El banco de inversión BNP Paribas dijo recientemente que las ganancias en bonos locales de mercados emergentes pueden provenir del lado de la divisa, ya que el dólar parece sobrevalorado a estos niveles tras años de apreciación.
En la misma línea, el fondo de inversión Schroders también ha estado sobre-ponderando los bonos locales de los países en desarrollo y prestando mayor atención a países con mayor rendimiento como Sudáfrica, Rusia, Brasil y Turquía. Según el fondo de inversión, «el factor clave es la debilidad del dólar estadounidense y no vemos aun que termine dicha baja en un futuro cercano».
Finalmente el banco JPMorgan también sostuvo que los bonos en moneda local son la clase de activos preferida dentro del espacio de deuda de los mercados emergentes, ya que aún están infravalorados.