La moneda estadounidense perdió un 1,21% frente al peso y ratificó la tendencia bajista que empezó el miércoles. La decisión de tasas del Banco Central junto con el mejor humor en los mercados externos disparó la entrada de capitales que decidieron volver a las inversiones en pesos, con las Lebac a la cabeza.
Ya despejadas las dudas sobre la tasa de referencia del Banco Central (BCRA) y con los mercados internacionales en calma, el dólar anotó ayer la segunda baja consecutiva y perdió más de la mitad de lo que había ganado la semana pasada. La divisa cayó 24 centavos en el segmento mayorista y cerró a $ 19,66, mientras que en las pizarras de la City llegó a $ 19,95.
Los operadores cambiarios coincidieron en señalar que la rueda fue netamente vendedora y que los máximos se marcaron al comienzo del día en $ 19,85, cinco centavos por debajo del cierre del miércoles. «El mercado de dólar mayorista spot abrió con gap muy ofrecido por bancos privados desde el arranque, con demanda escasa que no pudo contener liquidaciones moderadas de exportadores y flujos financieros, que al acentuarse sobre el final de la rueda hundieron la cotización hasta dejarla 24 centavos por debajo de la previa, sin participación significativa de bancos oficiales», sintetizó Global Agro Broker.
El dólar había empezado a caer el miércoles, luego de cuatro ruedas consecutivas de suba, con la expectativa de que el Banco Central (BCRA) no tocara su tasa de referencia. Una vez confirmada la decisión de la autoridad monetaria, la divisa siguió su derrumbe. Operadores consultados señalaron que la continuidad en la política monetaria indicó al mercado que el BCRA sigue atento a la inflación y que, por eso, no dejaría escapar mucho más el precio de la divisa.
La fuerte entrada de flujos financieros marcó la rueda cambiaria. «La oferta fue dominando en forma paulatina el desarrollo de las operaciones forzando bajas de los precios, con una velocidad que se incrementó en la última media hora del día. Los ingresos desde el exterior barrieron con las posturas de compra e hicieron que el tipo de cambio perforara la barrera de los $ 19,70, con mínimos que tocaron los $ 19,655 a poco de que terminara la fecha», explicó Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio, en un informe para sus clientes.
Los dólares provenientes del exterior se destinaron a inversiones en moneda local, con la Lebac a la cabeza. El mercado secundario de letras del BCRA operó ayer el equivalente en pesos a u$s 330 millones. La Lebac que vence este mes pagó en torno al 29% y el resto de los plazos se negociaron con tasas de entre 26% y 27%.
En la mesa de un banco internacional, en tanto, comentaron: «El mercado local está muy influenciado por los flujos del día. Cuando el spot llegó a $ 19,65 los extranjeros que habían vendido dólares ayer a $ 20,10, salieron a cubrir sus posiciones con futuros en $ 20. Así, se llevan el equivalente a toda la tasa de Lebac del mes, sin riesgo cambiario».
Más allá de las cuestiones locales que impulsaron la caída de la moneda estadounidense, el contexto internacional también ayudó a llevar calma al mercado cambiario. «Evidentemente, cambió bastante el humor en el mundo, ya desde el miércoles todas las bolsas quedaron positivas y el dólar se debilitó en el mundo. Eso hizo que apareciera oferta financiera de afuera», dijeron en una mesa bancaria, en la que agregaron que también se liquidaron algunas exportaciones.
Ayer fue un buen día para casi todas monedas de países emergentes, que mostraron apreciaciones. La performance más destacada fue la del peso argentino, que ganó 1,21% contra el dólar. Le siguió el rand sudafricano, que subió un 0,78%. «En un día en que los mercados internacionales operaron con optimismo y con el dólar americano debilitándose contra otras monedas, era lógico que llegara el contagio a nuestros mercados financieros», opinó Fernando Izzo, de ABC mercado de cambios. A pesar de la recuperación de los últimos dos días, desde que comenzó el año el peso es la moneda latinoamericana que más se devaluó, ya que anotó una pérdida de 6,41%.