El dólar libre subió dos pesos, a $160, un máximo desde abril. Las paridades bursátiles cortaron una racha bajista de ocho ruedas. El BCRA compró USD 25 millones en el mercado oficial, menos del 10% del monto ofrecido
Una mayor demanda de divisas empujó a la suba de las cotizaciones en todos los segmentos del mercado, un movimiento que los analistas consideran previsible a medida que se acercan las elecciones de medio término.
Mientras que el dólar libre llegó a su precio más alto en seis semanas, las paridades bursátiles cortaron una serie bajista de ocho ruedas y en la plaza formal el Banco Central cedió el paso a una mayor demanda privada, lo que ajustó las compras oficiales a menos del 10% del volumen operado.
El dólar libre registró una suba de dos pesos en el reducido mercado informal, a $160 para la venta, en su precio más alto desde los $162 del pasado 28 de abril. En el transcurso de 2021, el dólar “blue” sigue en negativo, pues cotiza seis pesos o 3,6% por debajo de los valores de cierre del año pasado, en los 166 pesos.
Los dólares que son negociados en la Bolsa, a través de activos financieros que cotizan a la vez en pesos y en dólares en el exterior, exhibieron ligera tendencia alcista, con un “contado con liquidación” a $164,40, y un dólar MEP a 158,85 pesos.
Operadores coinciden en que el BCRA acumulará menos reservas este mes y se perfila una tradicional dolarización de carteras previo a las elecciones de medio término en noviembre.
“A nivel cambiario, aún con menor ritmo en las compras, el BCRA sigue administrando el suave deslizamiento del dólar mayorista, el cual corre muy por debajo de la inflación a modo de ‘ancla’ en esta etapa electoral”, afirmó Gustavo Ber, economista del Estudio Ber.
“La calma también se respira entre los dólares financieros, que siguen hilando ruedas de mínimas oscilaciones, aún cuando los operadores reconocen que a partir de julio, con una menor oferta de divisas del campo y una mayor demanda preelectoral, el poder de fuego del organismo se pondría a prueba”, añadió Ber.
En el segmento formal el dólar subió tenuemente posiciones gracias al accionar del Banco Central desde la misma apertura de negocios, mediante la regulación de liquidez ante una masiva participación de exportadores cerealeros que vuelcan dólares al mercado.
Esta tónica se repite desde hace varios meses con la idea de llegar a fin de año con una devaluación del 25%, por debajo de la inflación presupuestado del 29% para el 2021 y lejos de lo previsto por analistas que promedian un incremento de precios cerca del 50 por ciento.
En el mercado mayorista, el tipo de cambio oficial ganó cinco centavos, a $95,30, con lo que extiende a 13,3% el ascenso en lo que va de 2021. Pero este gradualismo a su vez, expande la brecha cambiaria, que se estiró a 67,9% con el dólar libre, y a 72,5% con el “contado con liqui”.
“El dólar arrancó la semana con un ajuste en línea al trabajo que hace el Banco Central, mediante un volumen que se mantiene (…) y excedente de oferta que es adquirido por la entidad monetaria”, reportó la correduría ABC Mercado de Cambios.
“Una demanda autorizada algo más activa absorbió parte de la oferta disponible, recortando la chance de un resultado abultado para el BCRA”, comentó Gustavo Quintana, agente de PR Corredores de Cambio.
El monto operado en el segmento de contado (spot) alcanzó los USD 280,6 millones, en una rueda en la que fuentes privadas estimaron en unos USD 25 millones las compras oficiales, el 8,6% del total ofrecido.
En junio, el saldo neto positivo para el Banco Central por su intervención cambiaria alcanza los USD 450 millones, mientras que suma cerca de USD 6.200 millones en 2021, y llega a casi USD 6.800 millones desde diciembre del año pasado.
En mayo, la autoridad monetaria logró adquirir USD 2.089 millones, el mayor volumen mensual desde noviembre de 2019, mientras que desde julio es de esperar una baja de manera considerable en la liquidación de los exportadores cerealeros por cuestiones de estacionalidad.
Además, la mayoría de las monedas de países emergentes se depreciaron este martes ante un fortalecimiento del dólar provocado por la cautela previa al anuncio de política monetaria de la Reserva Federal estadounidense el miércoles.
Mientras tanto, los títulos privados y públicos mostraron disparidad de tendencias con negocios selectivos ante la participación de fondos extranjeros en búsqueda de ganancias especulativas de corto plazo.
El índice accionario S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires cerró con ligero sesgo alcista de 0,3%, a 67.005 puntos, ante inversores que aprovechan los precios devaluados contra el dólar. Este mercado anotó su máximo histórico intradiario en las 69.688 unidades el jueves último.
Los bonos en dólares con ley extranjera, los Globales emitidos con el canje de deuda, restaron cerca de 0,5% en promedio, mientras que el riesgo país de JP Morgan avanzó 13 unidades, a 1.488 puntos básicos. Por su parte, los bonos negociados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) avanzaron un 0,2% en su promedio en pesos.
La economía sigue afectada por una dura segunda ola de COVID-19, en momentos que el Gobierno negocia una prórroga con el Club de París por una deuda de unos USD 2.400 millones y renegocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por unos 45.000 millones de dólares.
“Es muy difícil ganar dinero en Argentina, el contexto es muy desfavorable, la presión tributaria hace que si ganas dinero, se lo lleve el Gobierno, y para ganar algo, hoy las PyME están evadiendo impuestos” sostuvo el economista Adrián Ravier, quien acotó que “es un país imposible para el emprendedor(…) donde se trabaja siete u ocho meses del año para el Gobierno”.