El dólar “blue” bajó 1,3%, a $373 y el “contado con liqui” tocó un récord de $386. El BCRA vendió USD 47 millones en el MULC. El S&P Merval perdió 1,3% y los ADR en Wall Street recortaron hasta 6%. Los títulos Globales perdieron 1,2% en promedio, con un riesgo país otra vez sobre los 2.100 puntos
La plaza bursátil argentina se movió en baja este jueves, aunque con volúmenes recortados, por un millonario canje de deuda en pesos lanzado por el Gobierno para despejar la incertidumbre del mercado en un año electoral y una economía en plena desaceleración.
El Ministerio de Economía ofreció una extensión de los plazos de vencimiento de deuda mediante opciones amortizables en 2024 y 2025, ya que se podrán cambiar títulos en pesos con vencimientos hasta junio próximo por otros atados a la inflación y al tipo de cambio.
“El Gobierno busca ‘rollear’ deuda para el 2024/2025, es alrededor del 50% de la deuda en pesos que amortiza hasta mitad de este año. Entre bancos, aseguradoras y empresas, el volumen se ubicaría entre 3 y 3,5 billones de pesos”, dijo a Reuters una fuente oficial bajo condición de anonimato.
El referencial bursátil S&P Merval porteño perdió un 1,3%, a 247.553 puntos, luego de aumentar un 1,8% el miércoles, previo al influyente canje voluntario de deuda y condicionado por una descontada nueva alza de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos a la brevedad.
En una sesión con pérdidas en un rango de 1,9% a 2,1% en los principales índices de Wall Street, las acciones y AR de empresas argentinas se tiñeron de rojo. La agroexportadora Cresud encabezó las bajas (-6,4%) luego de conocidas proyecciones muy pesimistas para la campaña agrícola argentina por efecto de la sequía, mientras que también las ventas golpearon fuerte a los bancos, grandes tenedores de los bonos en pesos: Banco Francés (-5,2%), Grupo Galicia (-4,6%), Banco Supervielle (-4,4%) y Banco Macro (-3,4%).
Los bonos negociados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) cedieron 0,4% en su promedio en pesos, para acumular una pérdida del 2,1% en las últimas tres rondas hábiles. Los bonos en dólares de Argentina negociaron con baja promedio de un 1,2%, según la referencia de los títulos Globales con ley extranjera en Wall Street, con un riesgo país que trepó 35 unidades a los 2.134 puntos básicos.
En medio de un lento proceso de aceptación de la oferta oficial, la agencia calificadora global S&P recortó el nota de deuda en moneda local del país austral a ‘SD/SD’ (Default Selectivo) desde ‘CCC-/C’. También rebajó la notificación en escala nacional de Argentina a ‘SD’ desde ‘raCCC+’.
“Según las estimaciones que manejan en el Palacio de Hacienda, la participación tendría un piso asegurado de 3 billones de pesos por el compromiso de las entidades para acompañar la operatoria. Todo lo que esté por arriba del 50% ya será un gran logro”, agregó. La oferta de canje se concretó este jueves, con liquidación el próximo martes.
Esto es “darle previsibilidad” al mercado para mejorar el acceso al crédito. Buscamos dar “certidumbre y credibilidad a la economía argentina”, afirmó recientemente el ministro de Economía Sergio Massa, en su tercer canje de bonos desde que asumió el cargo en agosto de 2022.
Argentina celebrará elecciones presidenciales hacia fin de año, en medio de un complejo escenario de devaluación, pérdida diaria de dólares desde las reservas del Banco Central y una proyección inflacionaria anual cercana al 100 por ciento.
El canje incluyó activos con vencimientos entre marzo y junio del 2023, a cambio de títulos “Boncer” atados a la inflación a abril y octubre 2024, y febrero 2025, más “Duales” ligados a la devaluación del peso a febrero y octubre 2024, y febrero 2025.
Nicolás Capella, analista del Grupo IEB (Invertir en Bolsa), explicó que “el lado bueno es que se despeja la curva de vencimientos y pueden bajar un poco las incertidumbres, lo cual puede favorecer un poco la curva ‘corta’ y también a que se quite un pco de presión al dólar. El lado malo de todo esto puede venir del lado del put (garantía) del Central, que se está instaurado e instrumentado. Hay que empezar a seguir qué tanto se ejerce, es decir bancos que lo compren y qué tanto lo empiezan a ejercer. Y si el BCRA tendrá que empezar a emitir para comprarle a los bancos los títulos 2024, llegado el caso, si los bancos deciden achicar posición. Porque en definitiva no deja de ser una cara más de lo que viene haciendo el Central, que es comprar títulos en el mercado secundario”.
“Mirando la foto completa, lo que está sucediendo en el exterior es fundamental para analizar el comportamiento de los mercados emergentes. Sin embargo, tenemos dos elementos locales que podrían afectar: el mega canje de (bonos en) pesos y la lectura de las últimas proyecciones (bajistas) de la producción del agro”, reportó Portfolio Personal Inversiones.
El dólar libre bajó cinco pesos
La divisa “blue” finalizó ofrecida a $373 para la venta, con una baja de cinco pesos (-1,3%) en el día, con lo que descontó la mayor parte de la suba de la rueda anterior, cuando ganó siete pesos. La brecha cambiaria con el dólar mayorista, que ganó 41 centavos a $200,36, quedó en el 86,2 por ciento.
Ahora, la cotización libre quedó por debajo de las bursátiles, pues el “contado con liqui” avanzó a $384,15 a través del Global 2030 (GD30C) en ByMA, mientras que el dólar MEP cerró a $375,86 con el Bonar 2030 (AL30D), ambos en máximos nominales. El “contado con liqui” llegó a negociarse por encima de los 386 pesos al promediar la rueda.
El monto operado en el segmento de contado (spot) del mercado mayorista cayó cerca de USD 170 millones (-43%) respecto del miércoles, a USD 225,9 millones y el BCRA terminó su intervención con ventas por 47,5 millones de dólares.
El BCRA anota en marzo ventas netas por USD 248 millones en el MULC y viene de ventas en febrero por USD 890 millones, un récord histórico para el segundo mes del año, debido a las menores liquidaciones del agro por la sequía. En el transcurso de 2023 el saldo negativo del Central en el MULC alcanza los 1.329 millones de dólares.
El Gobierno planea gastar alrededor de USD 1.800 millones en importaciones de gas natural licuado (GNL) este invierno, por debajo de lo gastado en 2022 y previo a la inauguración de un gasoducto clave desde la enorme formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta.
En el mercado se calcula que el Gobierno dejará de recaudar unos USD 20.000 millones este año por la abrupta caída en la producción agropecuaria, cuando negocia menores metas de reservas para el BCRA con el FMI para poder lidiar con graves problemas financieros.